martes, 27 de julio de 2010

LIBRO: Donde nace La Luz



Quiero compartir con todos ustedes mi último libro: "Donde Nace La Luz".
Es una historia fantástica, que lleva a un niño, a palpar la oscuridad más absoluta, la maldad plena. Es una historia de FE, de valor, de perdón. Donde la Palabra de Dios, rompe toda oscuridad, y enfrenta al lector a sus propios temores, dejando al lector la pregunta, que se hace en cada paso de esta aventura: ¿Crees tú, en Jesús, el Cristo?
 
Una aventura fantástica, en la que la Palabra de Dios tiene el personaje central. Una alegoría a las profundidades del corazón humano, que revelara las partes más ocultas del corazón. Te invito a compartir esta historia y a dejarte llevar por la Palabra de Dios, en el viaje más fantástico al corazón humano.
Puede pulsar la portada del libro o el enlace para descargar el libro en formato PDF.

Donde nace La Luz

martes, 20 de julio de 2010

Encontré un amigo.

EncontreunAmigo
No es fácil andar por la vida, dice alguien en la multitud,
Sí, hay que trabajar, luchar, pelear, gritar, llorar, y morir, dijo otro más allá,
Y soledad, desconsuelo, congoja, dolor, enfermedad y todo lo demás,
Fue un eco que se escuchó.

Si todo eso era YO, dijo uno que nadie notó,
Y moría en vacilación, en duda y temor,
Hasta que encontré a Cristo, el Señor,
Encontré un amigo, grito.

Todos callaron al momento, y en silencio lo miraron
¿Un amigo? has dicho, dijo alguien muy extrañado
¿Tú quieres decir alguien que esta a tu lado en toda ocasión?
Ya iba a responder, cuando entre la multitud continuaron:
¿Encontraste uno que te ama incondicional?
¿O acaso uno que comparte su pan?
¿Uno que levanta y esta a tu lado en la enfermedad?
¿O uno que no juzga tus errores y los perdona?, grito una mujer más allá,
¿O acaso uno que te ama más que el hermano?
Quien diera encontrar uno que me librara de mi maldad, dijo otro casi en llanto,
¿Has encontrado un amigo?, soñador, dijo un hombre rudo y enojado.

He encontrado a Jesús, el Señor, dijo el hombre alzando su voz,
Es un amigo de verdad, que me da todo lo que han dicho, y mucho más,
Me ha dado la vida, una vida de verdad,
Ya no busquen más, dijo el muchacho ahora gritando,
Jesús es el buen amigo, él quiere ser tu amigo,
Dijo señalándolos a todos, ahora la pregunta es:
¿Quieres ser tu amigo de Jesús, el Señor?

Henry Padilla Londoño

viernes, 16 de julio de 2010

Mi viejo y Yo

MiviejoyYo
Que viejo, tírame unas lukas que necesito.
Lo miro por un momento sin expresión.
No estas en nada, parce, voy a salir con mi nena,
El padre volvió a mirarlo, sonriendo un poco.

Que tengo que vivirla,
Gozar con mi nena, salir afuera,
Que esto me es una cárcel,
Tírame unas lukas.

¿Piensas que nací viejo?, o ¿qué ya no me acuerdo?
Que los años carcomieron mis recuerdos,
Piensas que no disfruto
Que no disfruto la vida plena.

Bájate de ese tren, tu juventud es chévere,
Pero no para destruir tu vida,
Sexo, hijos sin padres, mujeres y hombres destrozados,
Droga, momentos de luces, cerebros calcinados,
Rock Metal, que me eleva, pilas con la caída,
Rebeldía, ilusión del momento, dolor de años.

Hay uno que es Cool, chévere de verdad,
Jesús, el que llaman el Cristo,
El vivió una vida sin problemas,
Vivió pleno, tuvo amigos,
No tenia guitarra pero muchos lo seguían,
No usó drogas, y se elevó sobre todo,
Decían que era rebelde,
Porque solo hizo la voluntad de Dios,
Hablo de la fornicación, que NO es chévere,
Cásense, no se quemen.

Y si en otro planeta haz estado,
Y no conoces al más Cool de todos,
Su nombre es Jesús, el que murió en la cruz,
Aterrizas, el que resucito al tercer día.
Ah… ese, si ese, el Señor de Señores,
El Rey de Reyes, acércate a él, pídele perdón,
Y deja ya de quejarte, y haz algo por tu vida,
Lo mejor que puedes hacer,
Es entregar tu vida al Señor, A JESÚS, la pillas.


Henry Padilla Londoño

lunes, 12 de julio de 2010

La vida que pasa

lavidaquepasa
Pasa la vida, paso pensando, decidiendo,
Pasa el tiempo, pasa mi alma gritando,
Entre la tormenta de la decisión,
Entre la paz aparente de la sumisión.

Pasa el amor, pasa silbando,
Pasa mi vida, pasa cantando,
Pasa el amigo indiferente,
Pasa tu vida inconscientemente.

Pasan las cosas, y tú, pasas preguntando,
¿Por qué pasan? Destino o suerte
Pero hay algo que no pasa
La Palabra de Dios permanece para siempre.

EL pasar de la vida te agita,
Y tú vives en continuo pasar,
¡Alto! ¡Detente!
Que la vida no pase de ti indiferente.

El aire trae un susurro,
Que dice solemnemente,
El que en Él cree, no pasara,
Vida eterna tendrá.

No dejes pasar mis palabras,
Como el agua se te escapa entre los dedos,
Dejas ir tu vida, pasar,
Y lo más importante, dejas escapar.

Jesús, no lo dejes pasar,
Grita, que te escuche el mundo,
Que el viento lleve al cielo tu grito,
Tu clamor, que todos escuchen,
Ayúdame Señor, dilo fuertemente,
El no dejara pasar tus palabras.

Quién supiera, si esta palabra, ¿pasará de ti?

Henry Padilla Londoño

viernes, 9 de julio de 2010

Feliz 24 Aniversario

Aniversario
Caminando por las calles de mi ciudad,
El sol dejaba ver su esplendor,
y la hermosura del día me hizo pensar en ti.
Te vi en el vuelo del ave,
En la hermosura de la flor,
Te oí en el sonido del mar,
En el susurro del aire,
Te vi, mi amor, en la sonrisa del niño,
En la mirada amiga del que me ayuda,
Y no pude más que apretar tu mano,
Y en silencio te mire, contemple tu hermosura,
Y por un momento todo desapareció,
Se fue, el universo se comprimió,
Solos tú y yo, solos como al principio,
Como hace 24 años, cuando el cielo nos miro,
Y delante del Señor hicimos pacto de amor,
Como ese día, día de verano, en que granizo,
Por un momento los ángeles tiraron su arroz.
Y le conté al gorrión, al cielo, al mar,
Al amigo, al hermano y a todo el mundo,
Que tú eres mi amor,
Tu mi Jenny, el amor de mi vida,
Preciosa reina de mi corazón.

Henry Padilla Londoño

lunes, 5 de julio de 2010

Y dije NO...

YdijeNo
Los invito a leer esta corta historia, solo te tomara unos minutos, la he guardado en formato PDF, la podrás bajar en el siguiente link:
Si la lees, te invito a dejarme tu opinión, lo puedes hacer en el facebook en nuestro grupo, o en el blog.
Y dije NO...
Haz clic en la grafica o en el link para descargar o ver el PDF.

viernes, 2 de julio de 2010

Delante del altar

DelantedelAltar
Mis pasos me llevaron a tu altar,
Solo y cansado, un poco aturdido,
Llegue y me postre, delante del altar,
Casi no podía hablar, solo espere, delante del altar.

Por un momento solo escuche mi respirar
rápido y difícil, había dejado a mis enemigos atrás.
El silencio me envolvió por completo,
La penumbra ya lo invadía todo,
Una brisa suave se dejó sentir.

Mis pensamientos vinieron a ti, Señor,
Si había de morir, que fuera allí, delante de tu altar,
Mis ojos se inundaron de llanto,
Mientras el sonido de mis palabras débiles, se escucharon,
Señor Jesús, aquí estoy.

No temas, hijo, aquí estoy,
Y siempre he estado contigo.
¿Quién fue el que te hizo huir?
¿Quién hizo que tu corazón se llenara de miedo?

Sus palabras resonaron en mi corazón,
Y me dolió el corazón, tan torpe había sido,
Había huido delante del enemigo,
Y Dios estaba conmigo.

Perdóname Señor, vi la fuerza de mi enemigo,
Vi su número, su agilidad, y me atemorice,
Entonces corrí, y me olvide de ti, Señor, perdóname,
Perdóname por huir delante de mi enemigo.

Tú eres magnifico, Rey de los ejércitos,
Delante de tu presencia encuentro mi fortaleza,
Y a tu presencia el enemigo huye,
Dios fuerte, magnifico Señor, no hay otro como tú.

Mi corazón estará de continuo en ti,
Edificaras tu altar en medio de mi corazón,
Y estaré seguro, porque Tú estás conmigo.
Enfrentaré al ejército enemigo,
Y huira, porque Tú estás conmigo,
Dios de los ejércitos.

Venid, alcemos nuestras manos a Dios,
Alabemos al Señor, Rey Poderoso y Eterno,
Estaremos confiados, tranquilos,
Porque el Señor está con nosotros.

Vengan los humildes, los mansos,
los que buscan Su Palabra,
Postrémonos delante del Señor,
Conozcámoslo en nuestro corazón,
Dios poderoso, que da vida al que ha sido lavado,
Al que ha recibido la redención de Cristo.

El Señor edificara Su altar en nosotros,
El altar de Cristo, el único altar,
Altar de los hijos de Dios,
Los redimidos del Señor.

Henry Padilla Londoño