martes, 28 de diciembre de 2010

LIBRO: Jonás




Bendiciones a todos. Les invito a leer este nuevo libro, “Jonás”, basado en la historia del profeta Jonás. Aunque el libro es basado en la historia bíblica, la trama del libro es ficticia, pero el lector seguramente reconocerá muchos momentos de la vida del profeta. La Historia del libro, se desarrolla en nuestra época actual, en una ciudad que se llama New York, como la ciudad más famosa de nuestra época. Creo que el libro de Jonás, el libro bíblico, tiene mucho que enseñarnos, y considero que es muy actual. Escribiendo este libro, he orado mucho al Señor, no quiero alterar la historia bíblica, pero quiero atraer la atención a nuevos lectores, sobre todo a los jóvenes, a los tesoros que están encerrados en la Biblia. Espero que el lector, después de leer mi libro, o mientras lo hace, lea también el libro de Jonás en la Biblia. El lector debe siempre recordar que mis libros son solo ficción, y que la Palabra de Dios es la Verdadera Vida, y que en la Palabra de Dios, está el camino de la Salvación del hombre, a decir, Cristo.
Este libro será la primera parte, de una historia mayor, que el Señor me dirá cuando escribir, en la que nos adentraremos a fascinantes acontecimientos, de hombres y mujeres reales, que han dado su vida por lo que creen, y que a través de ellos, hemos recibido el testimonio de los tiempos, a decir, la Palabra de Dios.
Esta primera parte, es corta, y de fácil lectura, y puede ser leída por todas las edades, aunque existen algunas escenas algo duras para los lectores sensibles.
Te dejo en la compañía de Jonás, una luz en medio de la oscuridad.

Henry Padilla Londoño

martes, 21 de diciembre de 2010

La Navidad

Los copos de nieve caen lentamente, formando figuras para el ojo curioso,
La hermosura del paisaje se deshace, entre los gritos y risas de los niños,
Que corren y se tiran en la nieve, ya solo falta unos días,
Unos días para Navidad, un tiempo especial, una noche diferente a todas.

Mientras miro a mí alrededor, recuerdo mi infancia, tan diferente,
Como una manada desbocada por una loma, íbamos sin control,
Sin saber para dónde, ni cómo, solo íbamos, haciendo lo que todos hacían,
Cada vez más rápido, cada vez más descontrolados, a un abismo profundo.

Recuerdo que solo me importaba pasarlo bien, tomar licor, buscar un buen baile,
Todo sería perfecto si consiguiera una linda chica, con quien pasar esa noche,
Esa noche era para "disfrutar", ese era el sentido,
Y al otro día, que importaba donde amanecía, era mejor así,
Así era más respetado entre mis amigos, "ese si es un hombre" decían,
Y yo orgulloso sonreía, disimulando mi mareo, mi malestar.

Cada año igual, cada vez peor, cada año tenía que buscar algo más fuerte,
Así adquiría más experiencia, y me hundía en mi propio vómito,
En el estiércol de mi pecado, y arrastraba a todo el que me escuchaba,
Llevando y dejándome llevar, a un abismo profundo, lleno de pudrición, de dolor.

Qué curioso que piense ahora en eso, preciso para navidad,
Porque es la navidad, la que me hizo pensar, no en una fecha así, no recuerdo cuando,
Pero fue cuando nació el Salvador en mi corazón, el día de mi primer navidad real,
Ese día pude ver más claro, ese día me vi a mí mismo y me aborrecí.

Cuánto daño había hecho, cuanto dolor había causado,
Mis ojos empezaban a ser abiertos, solo veía sombras, y ya veía mi miseria,
Pero también vi una hermosa luz, una luz maravillosa,
Me rodeo, penetro en mis entrañas, me inundo, y ame por primera vez.

Mis ojos eran ríos de llanto, de arrepentimiento, de alegría,
Sabía que ahora vivía, pero también veía la muerte que había dejado atrás.
Tu mano me levanto, y me llamaste por mi nombre,
Entonces supe que para siempre te amaría, y nací de nuevo.

Navidad, hermoso tiempo, para todo el que conoce al Señor,
Porque eso celebramos, a Cristo que habita en nuestro corazón,
Cristo vivo, que murió y resucito, por mí y por todos,
Esa es la Navidad, esa es la Verdad.

Y descubrí una lágrima que rodaba por mi mejilla, una lágrima de agradecimiento,
Gracias Señor, por darme a conocer la Navidad, por grabar en mí tu nombre,
Por venir a rescatar a todos los pecadores, de entre ellos yo era el peor.
Gracias por no dejarme, por tu paciencia que me espero.
Gracias por perdonarme, y por restaurar a todos los que un día yo dañe,
Pero con tu amor, los llevaras a esa luz maravillosa, la misma que yo vi,
Y en ella dirán a una, Te amo Salvador, gracias por amarme, Rey y Señor.

Y vi un hombre que llevaba sus botellas de licor, y gritaba a su amigo,
"Vamos a alegrarnos, a celebrar la navidad"
Entonces los mire y les dije:
"La Navidad no está fuera, Cristo es la Navidad,
Recíbelo en tu corazón y conocerás la verdadera Navidad"
FELIZ NAVIDAD.

Henry Padilla Londoño

domingo, 19 de diciembre de 2010

Wikileaks, si es para reír….

Que puedo pensar de todo esto, que diré de este mundo,
No sé si reír o llorar, pero es como para llorar,
Si parece sacado de un mal libro de sátiras,
O de la ficción insaciable de algún escritor, ¿quizás soy yo?
No, tanta fantasía no tengo, si lo que pasa ahora en el mundo,
Deja a cualquier escritor, mudo de admiración, pálido de espanto,
¿Es verdad?¿No es ficción, no es una obra montada a la cual aplaudir?

No, es muy real, la prensa, la televisión, y todo cuanto decía informar,
A sido expuesto al ridículo, todos ellos juntos,
No pudieron informar, lo que un grupo de personas dejaron ver,
Los Wikileaks, ¿Dónde estaban ustedes señores periodistas?
Fallaron por unos 50 años, ¿fue solo un pequeño extravió?
¿Qué ha pasado que los últimos 50 años se les olvido informar lo más importante?

Y los políticos, ¿Qué mentira dirán ahora?
Upps, se nos chispotio! O algo parecido,
¿Con qué mentira convencerán ahora al pueblo?
Que no me meta en política, dirán algunos hermanos,
No lo hago, solo hablo de mi fe, y de mis historias,
Pero es imposible notar, la fantasía de estas personas,
Que nos han engañado por tantos años,
Sí, de ellos está escrito, en la Palabra, ella nos advierte de ellos.

Todas sus mentiras, pudren sus almas, sus vidas,
Su camino va directo al abismo, y tiene su parte en el infierno,
Solo por un poco de tiempo podrán seguir engañando,
Pero para el que quiera, una oportunidad hay,
Deja tu mentira y tu pecado, y conviértete a Cristo,
Confiesa tus pecados delante del Señor, deja tu vida de pecado,
Y recibirás la vida.
Pero apresúrate, la puerta esta por cerrarse,
Te ríes de mi mensaje, bueno, es tu derecho,
Pero quieras o no, ya lo leíste, y ahora es tu responsabilidad.
Bendiciones.

domingo, 5 de diciembre de 2010

La odisea del Amor

LaOdiseaDelAmor

El amor venia llorando, en el camino de la soledad,
El frio de la indiferencia soplaba y levantaba los recuerdos,
El día era triste, la escasa luz que se podía ver aún,
Era opacada por las sombras del temor y la incertidumbre.

¿Por qué lloras amor, por qué has dejado tu alegría?
Mi amada me ha dejado, se ha llevado mi corazón,
Si la ven díganle que la amo, que la estoy buscando,
Que la he perdonado, que el amor todo lo olvida.

Y su grito se escuchaba por todo el bosque,
Era un grito desgarrador, grito de dolor,
Amada, amada mía, ¿Dónde estás?
¿Por qué me has dejado, por qué me has olvidado?

Y un gorrión presuroso, voló cerca del amor,
Y canto una bella canción, canción inolvidable de amor,
Dicen que la han visto en el pueblo,
Buscando a Amor, arrepentida de haberse ido lejos de su amor.

Y el sol brillo entre las montañas, y carraspeo,
No llores Amor, yo la vi buscándote,
Gritaba de amor, llevaba el corazón en su mano,
Hermosa doncella, con vestidos de esperanza, radiante y brillante.

Amado, amado mío, ¿donde estas?
Perdona a tu amada, por un corto tiempo me perdí,
Pero tu amor me llamo, me inundo, me asedio,
Me atrapo cantando, me hizo brillar y llorar en mi corazón.

El amor extendió sus brazos, y alzo vuelo presuroso,
Y emitió un silbido, que decía:
Amada, ven a mí, levanta el vuelo hermosa princesa.
Yo voy a ti, ven a mí.

Y cuentan que el sol tuvo que taparse, de la poderosa luz que se hizo,
Cuando los amantes se encontraron, y se besaron.
Dicen que la creación se detuvo, y en reverencia se arrodillo,
Dicen que de ese amor, somos fruto, todos los nacidos de Dios.

Henry Padilla Londoño

Viaje al Infierno

Les dejo esta corta historia para que la lean y si les gusta, compártanla con sus amigos.
Viaje al Infierno

Necesitan tener instalado el pdf para poderlo ver, si no tiene el PDF, vayan a Scribd, ahí la podrán ver:
Henry Padilla en Scribd

jueves, 2 de diciembre de 2010

Carta al borde del abismo

CartaAlbordedelabismo


El corazón dolido y triste, llora lo que no tiene,
Busca lo que nunca allá, anhela lo de su hermano,
Trae cansancio al cuerpo y dolor al alma,
Pesa y es duro de llevar, trae conflicto y amargura a la mano.

Esta encerrado en una cárcel de ánimo dolido,
Pronto a dejar la vida, saluda a la muerte, mientras le giña el ojo,
Dice: Mañana cambiara mi suerte, mañana será…
Mañana estarás conmigo, te dice la muerte, no hay mañana…

Y en la muerte no hay luz, solo oscuridad y no descanso,
Dolor eterno, porque a los hombres les es dado esta vida,
La vida es más que el dolor, más que la angustia,
Si tan solo escuchas lo que la Vida te quiere hablar:

Yo habito con el humilde, con el que ama la Verdad,
Una puerta ha puesto el Señor, para salir de tu dolor,
La única salida, la salida de tu dolor, de tu angustia,
Cristo, el Señor, es la única salida,
todo el que pase por él, hallara la Vida.

No pido nada de ti, solo que creas en aquel que murió por ti,
No debes traer nada ante mí, recíbelo todo del que resucito.
La solución, la salida de esa oscuridad, de esa prisión de dolor,
Esta en Jesús, él es la Salida, él es la Vida, él es tu solución.

Se que has deseado la muerte, en tu angustia, en tu dolor,
Pero si mueres sin recibir a Jesús, estarás para siempre lejos de mí,
Yo soy la Luz de los hombres, te dice el Señor,
Ven ami, y sanare tus heridas, no luches mas, ven…

Si estás leyendo estas palabras, no pienses en el escritor,
Piensa en mí, Yo soy tu Señor, Jesús, el que murió y resucito,
Cierra tus ojos, ahí, donde estas, y di ahora conmigo:
Perdóname Señor, ven a mi corazón. Te amo, te amo Jesús.

A todo el que lo haga con fe en su corazón,
Traeré la vida a todo su ser, daré maravillas, aun los cielos se alegraran por ti,
Porque eres mi precioso tesoro, mi amado hijo,
Tú eres el deseo de mi corazón.

Por ti daré mundos, estrellas, por ti di mi Hijo amado,
Pensabas que nadie te amaba, creías que solo estabas,
Cuanto te he anhelado, cuanto te amo mi tesoro,
Déjate en mis manos, cuidare de ti, te mostrare lo que significa:
Ser Feliz, Ser Libre, Ser Verdadero, Ser… tú, mí amado hijo.


Henry Padilla Londoño

miércoles, 1 de diciembre de 2010

Cargando un muerto y R67

¿Como he de seguir en el camino?,
¿Como he de dejar atrás lo que me ata a este mundo?
Me miro y veo lo que no quiero
Lucho, pero entre mas lucho más me enlodo.

Estoy cansado de luchar, cansado de intentar,
He cargado con este mundo desde que me acuerdo,
La ira, la angustia, la duda, la tibieza,
La incredulidad, la hipocresía, las apariencias.

Te veo, Señor, tanta pureza, tanta Verdad,
Extiendo a ti mis manos,
Pero mis sentimientos me pesan, me atan a este mundo.
¿Qué he de hacer, como podre correr y dejar esto atrás?

Dura cosa te debe ser llevar un muerto a tus espaldas ¿Por qué lo cargas?
Me dijo la Palabra, desde las páginas entre abiertas de mi Biblia.
Pero, yo no lo quiero cargar, está en mí, me asedia, me acosa…
Mis ojos veían las palabras que se dibujaban delante de mí.

Sabemos esto, que nuestro viejo hombre fue crucificado con Cristo.
Mis ojos miraban fijamente las palabras, mi corazón latía rápidamente,
He estado engañado todo este tiempo,
He estado cargando un muerto.

El pecado ha engañado mis sentidos, y yo los he escuchado,
Pero… ¡la Palabra dice que ese hombre ha muerto!
Entonces te vi Señor, en la cruz, mientras padecías por mí,
Y me vi en ti, ese hombre que tanto aborrecía, fue crucificado juntamente contigo.


Porque el que ha muerto, ha sido libertado del pecado.
Gracias Dios, por sacar este muerto de mis espaldas,
La Palabra me ha liberado, Y si hemos muerto con Cristo,
Creemos que también viviremos con El.

Y el acusador vino a mí, ¿Acaso ya no sientes ira, angustia, incredulidad?
Mi cuerpo lo siente, pero ya no tiene poder en mí,
Ahora vivo por Cristo en mí,
Vivo la vida de la resurrección, y no la vida de mis sentimientos.

Y se que tú que lees, también has triunfado,
Te has levantado en el poder de la resurrección,
Has vencido al mundo, porque el está en ti.
Y te levantas del lodazal de tus sentimientos,
Llevando la Palabra de Dios en ti,
Mostrando a todos la luz que inunda tu vida,
Y resplandece como una poderosa estrella.
Ahora se, mi hermano(a), que eres un hijo(a) de Dios,
Y que levantaremos esta luz a todos,
Para llevar el mensaje de salvación a todos.
Ahora te bendigo, mi hermano(a),
Poderoso guerrero del Señor, harás proezas,
Bendito seas, poderoso hijo(a) de Dios.


Henry Padilla Londoño