martes, 28 de diciembre de 2010

LIBRO: Jonás




Bendiciones a todos. Les invito a leer este nuevo libro, “Jonás”, basado en la historia del profeta Jonás. Aunque el libro es basado en la historia bíblica, la trama del libro es ficticia, pero el lector seguramente reconocerá muchos momentos de la vida del profeta. La Historia del libro, se desarrolla en nuestra época actual, en una ciudad que se llama New York, como la ciudad más famosa de nuestra época. Creo que el libro de Jonás, el libro bíblico, tiene mucho que enseñarnos, y considero que es muy actual. Escribiendo este libro, he orado mucho al Señor, no quiero alterar la historia bíblica, pero quiero atraer la atención a nuevos lectores, sobre todo a los jóvenes, a los tesoros que están encerrados en la Biblia. Espero que el lector, después de leer mi libro, o mientras lo hace, lea también el libro de Jonás en la Biblia. El lector debe siempre recordar que mis libros son solo ficción, y que la Palabra de Dios es la Verdadera Vida, y que en la Palabra de Dios, está el camino de la Salvación del hombre, a decir, Cristo.
Este libro será la primera parte, de una historia mayor, que el Señor me dirá cuando escribir, en la que nos adentraremos a fascinantes acontecimientos, de hombres y mujeres reales, que han dado su vida por lo que creen, y que a través de ellos, hemos recibido el testimonio de los tiempos, a decir, la Palabra de Dios.
Esta primera parte, es corta, y de fácil lectura, y puede ser leída por todas las edades, aunque existen algunas escenas algo duras para los lectores sensibles.
Te dejo en la compañía de Jonás, una luz en medio de la oscuridad.

Henry Padilla Londoño

martes, 21 de diciembre de 2010

La Navidad

Los copos de nieve caen lentamente, formando figuras para el ojo curioso,
La hermosura del paisaje se deshace, entre los gritos y risas de los niños,
Que corren y se tiran en la nieve, ya solo falta unos días,
Unos días para Navidad, un tiempo especial, una noche diferente a todas.

Mientras miro a mí alrededor, recuerdo mi infancia, tan diferente,
Como una manada desbocada por una loma, íbamos sin control,
Sin saber para dónde, ni cómo, solo íbamos, haciendo lo que todos hacían,
Cada vez más rápido, cada vez más descontrolados, a un abismo profundo.

Recuerdo que solo me importaba pasarlo bien, tomar licor, buscar un buen baile,
Todo sería perfecto si consiguiera una linda chica, con quien pasar esa noche,
Esa noche era para "disfrutar", ese era el sentido,
Y al otro día, que importaba donde amanecía, era mejor así,
Así era más respetado entre mis amigos, "ese si es un hombre" decían,
Y yo orgulloso sonreía, disimulando mi mareo, mi malestar.

Cada año igual, cada vez peor, cada año tenía que buscar algo más fuerte,
Así adquiría más experiencia, y me hundía en mi propio vómito,
En el estiércol de mi pecado, y arrastraba a todo el que me escuchaba,
Llevando y dejándome llevar, a un abismo profundo, lleno de pudrición, de dolor.

Qué curioso que piense ahora en eso, preciso para navidad,
Porque es la navidad, la que me hizo pensar, no en una fecha así, no recuerdo cuando,
Pero fue cuando nació el Salvador en mi corazón, el día de mi primer navidad real,
Ese día pude ver más claro, ese día me vi a mí mismo y me aborrecí.

Cuánto daño había hecho, cuanto dolor había causado,
Mis ojos empezaban a ser abiertos, solo veía sombras, y ya veía mi miseria,
Pero también vi una hermosa luz, una luz maravillosa,
Me rodeo, penetro en mis entrañas, me inundo, y ame por primera vez.

Mis ojos eran ríos de llanto, de arrepentimiento, de alegría,
Sabía que ahora vivía, pero también veía la muerte que había dejado atrás.
Tu mano me levanto, y me llamaste por mi nombre,
Entonces supe que para siempre te amaría, y nací de nuevo.

Navidad, hermoso tiempo, para todo el que conoce al Señor,
Porque eso celebramos, a Cristo que habita en nuestro corazón,
Cristo vivo, que murió y resucito, por mí y por todos,
Esa es la Navidad, esa es la Verdad.

Y descubrí una lágrima que rodaba por mi mejilla, una lágrima de agradecimiento,
Gracias Señor, por darme a conocer la Navidad, por grabar en mí tu nombre,
Por venir a rescatar a todos los pecadores, de entre ellos yo era el peor.
Gracias por no dejarme, por tu paciencia que me espero.
Gracias por perdonarme, y por restaurar a todos los que un día yo dañe,
Pero con tu amor, los llevaras a esa luz maravillosa, la misma que yo vi,
Y en ella dirán a una, Te amo Salvador, gracias por amarme, Rey y Señor.

Y vi un hombre que llevaba sus botellas de licor, y gritaba a su amigo,
"Vamos a alegrarnos, a celebrar la navidad"
Entonces los mire y les dije:
"La Navidad no está fuera, Cristo es la Navidad,
Recíbelo en tu corazón y conocerás la verdadera Navidad"
FELIZ NAVIDAD.

Henry Padilla Londoño

domingo, 19 de diciembre de 2010

Wikileaks, si es para reír….

Que puedo pensar de todo esto, que diré de este mundo,
No sé si reír o llorar, pero es como para llorar,
Si parece sacado de un mal libro de sátiras,
O de la ficción insaciable de algún escritor, ¿quizás soy yo?
No, tanta fantasía no tengo, si lo que pasa ahora en el mundo,
Deja a cualquier escritor, mudo de admiración, pálido de espanto,
¿Es verdad?¿No es ficción, no es una obra montada a la cual aplaudir?

No, es muy real, la prensa, la televisión, y todo cuanto decía informar,
A sido expuesto al ridículo, todos ellos juntos,
No pudieron informar, lo que un grupo de personas dejaron ver,
Los Wikileaks, ¿Dónde estaban ustedes señores periodistas?
Fallaron por unos 50 años, ¿fue solo un pequeño extravió?
¿Qué ha pasado que los últimos 50 años se les olvido informar lo más importante?

Y los políticos, ¿Qué mentira dirán ahora?
Upps, se nos chispotio! O algo parecido,
¿Con qué mentira convencerán ahora al pueblo?
Que no me meta en política, dirán algunos hermanos,
No lo hago, solo hablo de mi fe, y de mis historias,
Pero es imposible notar, la fantasía de estas personas,
Que nos han engañado por tantos años,
Sí, de ellos está escrito, en la Palabra, ella nos advierte de ellos.

Todas sus mentiras, pudren sus almas, sus vidas,
Su camino va directo al abismo, y tiene su parte en el infierno,
Solo por un poco de tiempo podrán seguir engañando,
Pero para el que quiera, una oportunidad hay,
Deja tu mentira y tu pecado, y conviértete a Cristo,
Confiesa tus pecados delante del Señor, deja tu vida de pecado,
Y recibirás la vida.
Pero apresúrate, la puerta esta por cerrarse,
Te ríes de mi mensaje, bueno, es tu derecho,
Pero quieras o no, ya lo leíste, y ahora es tu responsabilidad.
Bendiciones.

domingo, 5 de diciembre de 2010

La odisea del Amor

LaOdiseaDelAmor

El amor venia llorando, en el camino de la soledad,
El frio de la indiferencia soplaba y levantaba los recuerdos,
El día era triste, la escasa luz que se podía ver aún,
Era opacada por las sombras del temor y la incertidumbre.

¿Por qué lloras amor, por qué has dejado tu alegría?
Mi amada me ha dejado, se ha llevado mi corazón,
Si la ven díganle que la amo, que la estoy buscando,
Que la he perdonado, que el amor todo lo olvida.

Y su grito se escuchaba por todo el bosque,
Era un grito desgarrador, grito de dolor,
Amada, amada mía, ¿Dónde estás?
¿Por qué me has dejado, por qué me has olvidado?

Y un gorrión presuroso, voló cerca del amor,
Y canto una bella canción, canción inolvidable de amor,
Dicen que la han visto en el pueblo,
Buscando a Amor, arrepentida de haberse ido lejos de su amor.

Y el sol brillo entre las montañas, y carraspeo,
No llores Amor, yo la vi buscándote,
Gritaba de amor, llevaba el corazón en su mano,
Hermosa doncella, con vestidos de esperanza, radiante y brillante.

Amado, amado mío, ¿donde estas?
Perdona a tu amada, por un corto tiempo me perdí,
Pero tu amor me llamo, me inundo, me asedio,
Me atrapo cantando, me hizo brillar y llorar en mi corazón.

El amor extendió sus brazos, y alzo vuelo presuroso,
Y emitió un silbido, que decía:
Amada, ven a mí, levanta el vuelo hermosa princesa.
Yo voy a ti, ven a mí.

Y cuentan que el sol tuvo que taparse, de la poderosa luz que se hizo,
Cuando los amantes se encontraron, y se besaron.
Dicen que la creación se detuvo, y en reverencia se arrodillo,
Dicen que de ese amor, somos fruto, todos los nacidos de Dios.

Henry Padilla Londoño

Viaje al Infierno

Les dejo esta corta historia para que la lean y si les gusta, compártanla con sus amigos.
Viaje al Infierno

Necesitan tener instalado el pdf para poderlo ver, si no tiene el PDF, vayan a Scribd, ahí la podrán ver:
Henry Padilla en Scribd

jueves, 2 de diciembre de 2010

Carta al borde del abismo

CartaAlbordedelabismo


El corazón dolido y triste, llora lo que no tiene,
Busca lo que nunca allá, anhela lo de su hermano,
Trae cansancio al cuerpo y dolor al alma,
Pesa y es duro de llevar, trae conflicto y amargura a la mano.

Esta encerrado en una cárcel de ánimo dolido,
Pronto a dejar la vida, saluda a la muerte, mientras le giña el ojo,
Dice: Mañana cambiara mi suerte, mañana será…
Mañana estarás conmigo, te dice la muerte, no hay mañana…

Y en la muerte no hay luz, solo oscuridad y no descanso,
Dolor eterno, porque a los hombres les es dado esta vida,
La vida es más que el dolor, más que la angustia,
Si tan solo escuchas lo que la Vida te quiere hablar:

Yo habito con el humilde, con el que ama la Verdad,
Una puerta ha puesto el Señor, para salir de tu dolor,
La única salida, la salida de tu dolor, de tu angustia,
Cristo, el Señor, es la única salida,
todo el que pase por él, hallara la Vida.

No pido nada de ti, solo que creas en aquel que murió por ti,
No debes traer nada ante mí, recíbelo todo del que resucito.
La solución, la salida de esa oscuridad, de esa prisión de dolor,
Esta en Jesús, él es la Salida, él es la Vida, él es tu solución.

Se que has deseado la muerte, en tu angustia, en tu dolor,
Pero si mueres sin recibir a Jesús, estarás para siempre lejos de mí,
Yo soy la Luz de los hombres, te dice el Señor,
Ven ami, y sanare tus heridas, no luches mas, ven…

Si estás leyendo estas palabras, no pienses en el escritor,
Piensa en mí, Yo soy tu Señor, Jesús, el que murió y resucito,
Cierra tus ojos, ahí, donde estas, y di ahora conmigo:
Perdóname Señor, ven a mi corazón. Te amo, te amo Jesús.

A todo el que lo haga con fe en su corazón,
Traeré la vida a todo su ser, daré maravillas, aun los cielos se alegraran por ti,
Porque eres mi precioso tesoro, mi amado hijo,
Tú eres el deseo de mi corazón.

Por ti daré mundos, estrellas, por ti di mi Hijo amado,
Pensabas que nadie te amaba, creías que solo estabas,
Cuanto te he anhelado, cuanto te amo mi tesoro,
Déjate en mis manos, cuidare de ti, te mostrare lo que significa:
Ser Feliz, Ser Libre, Ser Verdadero, Ser… tú, mí amado hijo.


Henry Padilla Londoño

miércoles, 1 de diciembre de 2010

Cargando un muerto y R67

¿Como he de seguir en el camino?,
¿Como he de dejar atrás lo que me ata a este mundo?
Me miro y veo lo que no quiero
Lucho, pero entre mas lucho más me enlodo.

Estoy cansado de luchar, cansado de intentar,
He cargado con este mundo desde que me acuerdo,
La ira, la angustia, la duda, la tibieza,
La incredulidad, la hipocresía, las apariencias.

Te veo, Señor, tanta pureza, tanta Verdad,
Extiendo a ti mis manos,
Pero mis sentimientos me pesan, me atan a este mundo.
¿Qué he de hacer, como podre correr y dejar esto atrás?

Dura cosa te debe ser llevar un muerto a tus espaldas ¿Por qué lo cargas?
Me dijo la Palabra, desde las páginas entre abiertas de mi Biblia.
Pero, yo no lo quiero cargar, está en mí, me asedia, me acosa…
Mis ojos veían las palabras que se dibujaban delante de mí.

Sabemos esto, que nuestro viejo hombre fue crucificado con Cristo.
Mis ojos miraban fijamente las palabras, mi corazón latía rápidamente,
He estado engañado todo este tiempo,
He estado cargando un muerto.

El pecado ha engañado mis sentidos, y yo los he escuchado,
Pero… ¡la Palabra dice que ese hombre ha muerto!
Entonces te vi Señor, en la cruz, mientras padecías por mí,
Y me vi en ti, ese hombre que tanto aborrecía, fue crucificado juntamente contigo.


Porque el que ha muerto, ha sido libertado del pecado.
Gracias Dios, por sacar este muerto de mis espaldas,
La Palabra me ha liberado, Y si hemos muerto con Cristo,
Creemos que también viviremos con El.

Y el acusador vino a mí, ¿Acaso ya no sientes ira, angustia, incredulidad?
Mi cuerpo lo siente, pero ya no tiene poder en mí,
Ahora vivo por Cristo en mí,
Vivo la vida de la resurrección, y no la vida de mis sentimientos.

Y se que tú que lees, también has triunfado,
Te has levantado en el poder de la resurrección,
Has vencido al mundo, porque el está en ti.
Y te levantas del lodazal de tus sentimientos,
Llevando la Palabra de Dios en ti,
Mostrando a todos la luz que inunda tu vida,
Y resplandece como una poderosa estrella.
Ahora se, mi hermano(a), que eres un hijo(a) de Dios,
Y que levantaremos esta luz a todos,
Para llevar el mensaje de salvación a todos.
Ahora te bendigo, mi hermano(a),
Poderoso guerrero del Señor, harás proezas,
Bendito seas, poderoso hijo(a) de Dios.


Henry Padilla Londoño

martes, 30 de noviembre de 2010

De tu interior

De Tu Interior

Se escucha el sonido
Sonido de Dios
Se escucha el sonido
De una canción

Lo escucho aquí dentro
En mi corazón
Lo escucho con fuerza
De tu interior

Ven a Cristo, Ven a él
Sanara todo tu ser
Ven a Cristo, Ven a él
Deja ya tu carga en él.

Se escucha el sonido
De la Salvación
Anda rondando
Tu corazón

Lo escucho en la calle
Y en la congregación
Lo escucho que sale
De tu interior

Ven a Cristo, Ven a él
Sanara todo tu ser
Ven a Cristo, Ven a él
Deja ya tu carga en él.


Henry Padilla Londoño

lunes, 22 de noviembre de 2010

Un camino inesperado

UnCaminoInesperado

Este es un testimonio que escuche, y adapte en forma de historia y postal. Déjenme sus comentarios.

Un camino inesperado

Sabía que algo estaba mal, él solo me miro seriamente,
"Voy a buscar un amigo, no me esperes"
¿Adónde vas hijo? Pero solo quedo el silencio,
El silencio elocuente que da voces en mi corazón.

Mis rodillas doble, y oré, oré al Señor con todo mi corazón,
Cuida de mi hijo, cuida de su vida,
Tráelo a tus pies, tráelo a la cruz, enséñale la luz,
Escucha mi oración, atiende mis ruegos, Señor.

La vieja nada sabe, ella es de otra época,
Tengo que vivir, salir de este lugar, este sitio me ahoga,
Todos esos cuentos de Dios y Salvación,
Cuentos de la vieja, yo soy dueño de mi vida.

Y se vio corriendo, llevando el botín de su robo,
Buscando esconderse, huyendo de la justicia.
¿Dónde? ¿Aquí o allá? Donde no me pillen,
Dentro de ese monte de basura, ahí me esconderé.

No sé por qué el Señor me manda a hacer esto,
Se dijo el joven, que dudoso avanzaba hacia el sitio solitario,
Dios le había mandado predicar sobre un monte de basura,
Y a toda voz, sin ver a nadie, predico el evangelio,
Obedeciendo la voz del Señor, su mandato.

Y más tarde el joven, que ahora era pastor,
Recibió testimonio, de uno que dijo ahora ser salvo,
Porque mientras huía de la justicia,
Alguien le predico sobre un monte de basura, ahí encontró al Señor.

Henry Padilla Londoño
Adaptado de un testimonio que escuche.

sábado, 20 de noviembre de 2010

Mi último Sueño

miultimosueno


Mientras estaba en la soledad de mi habitación,
Un sueño me alcanzo, me tomo por un momento,
Podía verlo delante de mí, fui feliz por un instante.
Quería seguir viendo esa imagen, quedarme ahí para siempre.

Soñé que estábamos juntos, soñé que te abrazaba,
Me miraste y tu sonrisa iluminó el mundo,
Te dije: Te Amo, mientras me mirabas, con gran felicidad.
Cogiste mi cara entre tus manos y susurraste a mi oídio.
Te amo, te amo con todo mi corazón.

Todo el universo desapareció para mí,
Tus palabras me tomaron y me llevaron a un mundo de felicidad,
Cuanto te extraño, mi amor, quiero quedarme aquí contigo.
Quiero hacer un nido en el sueño, robarle la salida a la realidad.

Mis manos no lograron tomar el sueño, se escapó,
Se fue de entre mis ojos, y un llanto se ahogó en mí,
Vuelve, no me dejes, vuelve a mí, hermosa de mi corazón.
Ya todo volvió a la soledad, al frío de mi habitación.

¿Cómo podre llenar este gran vacío? ¿Cómo podre vivir?
Entonces le hice un reclamo a Dios:
¿Por qué te has llevado a mi amor?
¿Por qué me has dejado solo, en este mundo frío?

Solo se escuchaba el sonido de mis lágrimas,
Cuando caían al piso, mis quejidos.
Mis recuerdos me llevaron a escuchar tu voz:
Mi amor, no te alejes del Señor, él es la vida,
Él podrá llenar el vacío en tu vida, solo él.

Dios, lléname de lo mismo que le diste a mi amada,
Lléname, de esa vida que la hacia brillar en medio de la oscuridad,
Saca de mí el frío, y la soledad,
Lléname de ti Señor, quiero estar listo un día, para estar de nuevo con ella.

Entonces un calor me empezó a inundar, de en medio de mí,
Y ahogo mi grito, mi llanto, mi inundo y lleno mis sentidos,
Caí de rodillas en mi cuarto, nunca había sentido tanta felicidad.
En medio de esa luz lo vi, a Jesús, me sonreía.

Ahora conozco la verdadera felicidad,
Ahora el vacío en mí se ha ido,
Amada, como anhelo verte para compartirte esta verdad,
Y Fue entonces que te vi, junto a él, sonriente.

Gracias, Jesús, tú has llenado mi vida,
Has sacado el frío y la soledad,
Me has mostrado el verdadero amor, la vida,
Mientras miraba atrás, mi cuerpo tirado en la habitación.

Henry Padilla Londoño

viernes, 19 de noviembre de 2010

Gracias Señor

GraciasDios

Me acuerdo de ti en mi silencio,
En mis vigilias de la noche te espero,
Como el vigilante espera la mañana,
Como la flor anhela el viento cálido en invierno.

Mi corazón está agradecido Señor,
Por las bondades que has hecho conmigo,
Has mostrado tu gran bondad y amor,
Me has hecho saborear de tu bondad.

Cuando creía conocer y saber,
Hable en mi apresuramiento,
Y dude, dude de lo que harías.
Me apresure a proferir palabra.

Pero tú haces las cosas,
Mejor de lo que pedimos o entendemos,
Y no nos das de acuerdo a nuestras obras,
Sino en tu gracia y en tu bondad, nos ayudas.

Antes que hablara, ya lo habías hecho,
Y cuando mire, he aquí, estaba hecho,
Tu bendición habías derramado,
Tu amor todo lo había cambiado.

Y yo, solo quiero alzar mis manos,
Alabar y exaltar al Señor,
Al único que hace maravillas,
A Él sea la Gloria, Dios bueno.

Tú eres mi Dios, Rey y Señor,
Yo tu siervo, el que has redimido,
Al que lavaste con la sangre del cordero,
Al que llenaste de tu bendición.

Henry Padilla Londoño

martes, 16 de noviembre de 2010

Momentos

momentos

Un momento, está entre el caos y plena paz,
Entre la muerte y la vida,
Un momento, en una decisión, entre el aquí y el allá.

Un momento, tiempo de los mortales,
Eternidad del alma,
Que se abre paso entre la luz y las tinieblas.
Un momento, clave del más allá, momento del aca.

Entre el ahora y el instante que paso, ese instante que no viste,
Ahí está tu eternidad, fácil de tomar,
Vives como para cien años,
¿Y no tienes un momento para Dios?

El tiempo tiene color transparente,
La muerte es de color negro,
La vida, blanca es,
Y un momento está entre los tres.

¿Tienes un momento para decidir tu eternidad?
La vida se te escapa, como agua entre tus manos,
Dejas ir los momentos, solo quedan recuerdos,
Recuerdos de lo que no hiciste, de lo que fue, pero ya no es.

¿Quieres doblar el tiempo?
¿Quieres unir tu pasado y tu presente, y palpar la eternidad?
Recibe la vida en tu corazón, y recibirás la eternidad.

El que en mí cree tiene vida eterna,
Eso dijo el Autor del tiempo,
¿Tienes un momento para Dios?

Henry Padilla Londoño

jueves, 11 de noviembre de 2010

EL pintor.

elpintor
Caminando en la ciudad, dejando los pensamientos llegar,
Recordaba tus ojos, tu mirar, esa mirada que me acariciaba,
Llenas mi vida, me haces vibrar, pero sé que algo falta, no sé que es…
Lo sientes tú también, quisiera tenerte aquí, ¿que pensaras?

Quisiera que huyéramos al sol, escondernos en Orion, solos tú y yo.
Dejarlo todo atrás, y volar, sentir la inmensidad a nuestros pies,
Abrasarte y besarte, pero falta algo más, no sé que es, ¿Dónde estás?
Aquí y allá, yo solo lo sé, ¿y a ti qué?, pero sé que algo tengo que hacer….

La música me llama, empuja mis pensamientos, queriéndolos sacar,
Y a ti que, que me miras como de Marte, déjame ser,
¿Dónde estás? Quiero correr, vivir, hacerlo todo y no hacer nada.
¿Qué he olvidado?, algo… sé que algo tengo que hacer…

¿Qué haré? Parece que ya todo fue hecho, nací en un mundo cosmético,
Donde vivo para llenar el espacio, no quiero sus reglas,
Y que hay de Dios, si ellos hubieran podido le hubieran puesto delantal,
Lo tratan como el sirviente, haz esto y haz aquello, que groseros.
 
 
Es lo único que me llama la atención, a él no lo han podido domar.
Dios es chévere o cool, suena mejor, no se ha dejado cambiar.
Lo quisieron encerrar y ponerle una sotana, se quedaron viendo el polvero,
Porque a él no lo pueden manejar, por eso me gusta.
 
Que dices Dios, nos vamos los tres, mi niña yo y tú,
Y dejamos todo atrás, podrías hacernos otro mundo, y empezamos otra vez.
Yo sé que no, eres un Dios bueno, y nos amas a todos,
Gracias, sin ti este mundo sería muy aburrido.
 
Ya me acorde, tenía que hablar contigo, eso era lo que tenía que hacer.
Tú eres como un buen pintor, y yo, yo soy tu pincel,
Estas por pintar un hermoso cuadro, y necesitas un pincel,
Bueno úsame a mí, no sé hacer nada, pero creo en ti,
Y sé que con eso pintaste los mundos, solo fe, eso es, solo fe.
 
Lo sé, tú me haces entender, que en el amor y la amistad,
Ahí habitas tú... y yo, yo quiero estar donde tu estas.
Que me miran como nada, piensan: de ese no saldrá nada.
Pero no saben, ¿cierto?, no saben nada, no saben...
Que te conozco, y que juntos tú y yo, daremos pinceladas.
 
Pintor, píntame una bella casa, una bella esposa, pinta amor,
Y píntame también felicidad, y mucho amor, ah... y otra cosa,
Pinta en mi casa tu nombre, para que todos sepan que tú, Señor, eres mi pintor.
 
Henry Padilla Londoño
 
 
 

miércoles, 10 de noviembre de 2010

Mis cielos y mi tierra

MisCielosMiTierra

¿Quién vivirá en los nuevos cielos y la nueva tierra?
Yo quiero ver esa maravillosa creación, esa perfecta y virginal creación,
Donde el hombre no a destruido las selvas,
Donde los mares no están manchados de petróleo.
Donde los rinocerontes no son muertos por sus cuernos,
Donde la fama no se viste de pieles.

Señor, llévame a vivir a esa tierra, a ese cielo,
Donde el hombre no mata al hombre,
Donde la niña no es vendida por unas monedas,
Donde los niños no roban para comer,
Donde el hombre no esclaviza al hombre.

Esa esperanza tengo, un día la veré con mis ojos,
Esa preciosa tierra, toda la tierra será llena de tu Gloria,
Y los cipreses aplaudirán a tus hijos,
Y los hombres tendrán los días de los arboles.
La muerte es desterrada, así como el pecado,
Y todos los que destruyen la tierra desaparecerán.

Esa hermosa tierra, y ese hermoso cielo,
Serán alumbrados por tu luz maravillosa, Señor,
Tú serás su sol y su luna,
El que responde antes que tus hijos hablen.

Yo espero estos cielos, y esta tierra,
Yo se que tus promesas son firmes y verdaderas,
Y un día, me gozare en ese hermoso paraíso.

Henry Padilla Londoño

lunes, 8 de noviembre de 2010

e@t: ¿Qué escoges?

Isa53

Tan cerca, pero tan lejos,
Pasas junto a la luz, sin verla.
Chocas de frente con la verdad, sin reconocerla
Tropiezas con la vida y la maldices.

Todos nos extraviamos del camino,
Cada cual siguió el antojo de su corazón.
La oscuridad reino, la muerte nos atrapo.
Pero el Señor cargó en él, nuestros pecados.

El Señor tomó nuestra oscuridad, nuestra maldad,
La cargo sobre él, nos libro de la muerte.
¿Quién puede recibir esta gracia?
¡Todos! Todo aquel que crea en su corazón.

Este es el evangelio, las buenas noticias.
Que si crees que Jesús murió por ti,
Y te arrepientes de tus pecados,
Recibes la vida y el perdón.

La luz ha brillado a los hombres,
La Verdad se dejó ver de todos.
Jesús, que murió por ti y vive para ti,
Es la verdad y la luz, el único camino.

¿Qué escoges? ¿Quieres vivir en la luz o en la oscuridad?

Henry Padilla Londoño

sábado, 6 de noviembre de 2010

Mi viejo amigo

MiviejoAmigo
Llegue a tu lado, te mire por un momento,
Viejo amigo, parecía que me mirabas,
Inmóvil, solemne y silencioso.
Al final siempre nos encontramos, tú y yo.

Cuantos recuerdos, cuantos secretos revele a tu lado,
¿Cómo estas, viejo amigo? El tiempo ha pasado,
Aún tú, Aun tú no eres inmune al tiempo.
Pero después que yo me vaya, tú seguirás en pie,
Guardando secretos, siendo testigo de todo lo que ves.

Ves mis canas, han empezado a aparecer,
Si parece que fue ayer que corría a tu alrededor,
¿A dónde se fueron mis días, mis sueños?
Los que soñé a tu lado, viejo amigo.
Se han ido, no todo salió como planeamos,
Pensándolo bien, nada salió como esperábamos.

Como un viento poderoso, la vida me golpeo,
Igual que a ti, y se llevó mis sueños.
Me desnudo, no me soltó hasta casi acabarme.
Y tirado, esperando el final,
Llego él, pensé que era la muerte.
Me levanto en silencio, no decía nada,
¿Y ahora qué?, pensaba yo, ¿Qué más me puede pasar?

Empezó a limpiar mis heridas,
Y me cuido como a su hijo,
Me alimento y me vistió, estuvo a mi lado,
Sano mis ojos, los limpio con colirio,
Abrió mis oídos, y entonces oí.

Amigo, eso vine a decirte,
Lo maravilloso que todo es ahora,
Ahora veo, ahora escucho, viejo amigo, ahora soy feliz.
Han vuelto los sueños, he vuelto a vivir.

Ya viene el invierno, y tus hojas han caído ya,
Hay esperanza, aún para ti,
Él todo lo puede cambiar,
Y cambia los corazones, transforma las mentes.

Los que ahora te destruyen y acaban,
Un día no serán más, y todo será de él.
Y entonces nadie te dañara.

Ah, casi lo olvido, por si un día lo ves,
Se llama Jesús, el buen amigo,
Él fue el que me ayudo.

Henry Padilla Londoño

martes, 2 de noviembre de 2010

HOY, hoy es el día.

Hoyeseldia
Hoy es el día, hoy, tiene que ser hoy,
¿Cuántas veces lo he intentado? ¿Cuántas he fallado?
Hoy es el día, hoy lo hare diferente,
Te encomiendo este día a ti Señor,
Hoy, quiero dejar este día en tus manos.

Lo intentare una vez más, me levantare en tu nombre,
No me acordare de mis fracasos,
Mis fracasos, solo hablan de que cada vez estoy más cerca de mi triunfo,
Voy a aprender, esta vez voy de tu mano,
Contigo, Señor, lo lograre, esta vez lo hare.

Y si una vez más, tuviera que levantarme,
Lo hare, estando a tu lado, todo pierde sentido,
Hoy, entrego este día en tus manos, y me esforzare,
En tu nombre, diré a esta montaña, ¡quítate y tírate a la mar!

Hoy es el día para ver el milagro de mi vida,
No estaba caído, solo descansando, pero ahora me levanto,
Me levanto y dejo todo atrás, mírenme, los que decían lo vencimos,
Mírenme pararme, levantarme en el nombre del Señor.

El cielo y la tierra pasaran, pero tus palabras no pasaran,
Y yo soy un renacido de tu Palabra, por eso:
Me levantare HOY, y hare lo que para el hombre es imposible,
Pero para ti oh Dios, todo es posible.
HOY. HOY es mi día.

Henry Padilla Londoño

sábado, 30 de octubre de 2010

Mis delicias están con ellos

misdelicias
El Señor miraba desde los cielos, buscando un entendido,
Uno que escuchara su voz, uno que amara la verdad, y la justicia,
Uno que brillara en la oscuridad, que aborreciera la maldad,
Sus ojos recorrían toda la tierra, ¿Dónde estarás?

Y me levanto el espíritu, me llevo al desierto,
Viendo entre la arena y el viento que soplaba,
Me llevo a recorrer por un gran desierto,
Aunque hermoso, estaba solo, no había uno solo.

Y me llevo a una ciudad entre ruinas, completamente sola,
Era toda destruida, una gran guerra la había destruido,
No había hombres, ni animales, solo el viento soplaba.
¿A dónde se han ido todos los hombres, los animales?

Y me levanto por el mar embravecido, que se levantaba furioso,
El viento y el mar bailaban, en una violenta danza de poder.
Parecía que la tierra era desolada, anhelo escuchar una voz,
Un susurro, un cantico, una queja de amor, pero todo era silencio.

¿A dónde se han ido los hombres? Y mis lágrimas cayeron,
Y fueron atrapadas por el poderoso viento, que las destrozo,
Burlonamente y sin compasión,
Señor, mi Señor, dije en mi corazón.

¿Han todos dejado el camino? ¿No hay siquiera uno?
Y lloraba a caudales, ríos salían de mis ojos,
Mire con gran tristeza la tierra, y vi una pequeña cueva,
Y allí me tomo el espíritu, rápido y en un instante.

La oscuridad todo lo envolvía, la humedad,
Miraba desesperado, ¿Dónde estás?
Y escuche un susurro, un quejido, algo rompió el silencio,
Y suavemente, flotando, me acerque, era cada vez más fuerte,
Era una voz, una niña, que cantaba un cantico.

Bendito, bendito, sea el Señor, Rey soberano, Dios poderoso,
Que nos ha rescatado, y nos ha amado,
Bendito el Señor Jesús, Salvador eterno, Rey de toda la tierra.
Y su canto me hizo llorar, era hermoso, era como agua al sediento.

Y vi que la niña era ciega, pero estaba llena de luz,
Y seguí sus pasos, alumbrado por su luz, fascinado,
Y una poderosa luz me rodeo, y un canto poderoso,
Que venia de todas partes, retumbo, era como si el cielo se hubiera abierto:

Bendito, bendito es el Señor,
Que nos rescato, nos amo, bendito es el Señor.
Eran miles y miles de hombres y mujeres, todos ellos cantando,
Era un espectáculo maravilloso, nada igual he visto jamás.

Todos alzaban sus manos, adoraban al Señor,
Jesús, decían a gran voz, tú eres Rey eterno, soberano Señor,
Mis ojos no podían más, ríos de alegría brotaban de mi interior,
Ahí estaban, los redimidos del Señor.

Y una poderosa voz retumbo en mis oídos, era el Señor:
Mientras haya sol y luna, yo guardare a mi pueblo,
No faltara el que alabe mi nombre, el que a mi mire en amor.
Yo, los he redimido para mi, hijos e hijas, con ellos esta mi delicia.

Yo quería quedarme, era un sitio fascinante,
Pero el espíritu me tomo y me dijo:
Di a mi pueblo que yo estoy con ellos, que amen la verdad,
Que busquen a mi Hijo, Jesús,
Diles, que los amo, que mis delicias están con ellos.


Henry Padilla Londoño

lunes, 25 de octubre de 2010

Un sitio para dos

UnSitioParaDos
EL viento sopla furioso en las calles de mundo,
Los rostros distantes, tristes y pálidos, son testigos mudos, en silencio,
El hambre llena cada rincón, la desesperación,
Tu vida se ha ido en un amargo intento.
Tus ojos miran, cansados, la misma escena,
Lo has visto por mucho tiempo, parece que ya no hay esperanza.
Una lágrima, en la soledad, da testimonio de tu sentir,
Solo, muy solo, ¿Dónde quedaron esos lindos momentos?

Corres, entre tus dones, no sabes que escoger,
Todo es hermoso, ¿Qué escogeré?, porque todo me gusta.
Tus ojos brillantes y llenos de vida, eres toda vitalidad,
La vida te sonríe, y todo está delante de ti
Soy privilegiado, escogido para algo importante,
Sí, eso creeré, así me lo confirman, todos los que me rodean.
Tu sonrisa es como un resplandor, que alumbra todo el sitio a tu alrededor.
Y mientras corres por las calles, ves esos rostros en la calle,
Esos..., sentados en la calle, mirando a la nada.

¿Por qué no buscarán trabajo?, vagos, deberían llevárselos presos.
Tarde ves el brillo del cuchillo, que rompe tu preciado saco,
Y entra en ti, sacándote la vida, gota a gota.
No lo puedes entender, ¿Por qué viniste hoy aquí?
Y tirado en el piso, ves caer a tu asesino, a tu lado, sangrando,
Herido por la bala de la justicia.
La vida se escapa, la muerte los ha envuelto en su manto,
¿Por qué?, ¿Ya era hora?, ¿Quién dijo qué?

La oscuridad absoluta los envuelve, y abres tus ojos,
Buscando tú gloria, y vez la brasa que te abrasa,
Tormento, dolor, ¿Qué estoy haciendo aquí?
Ese…, ese si debe estar aquí, piensas en odio,
Mirando a tu asesino, a tu lado, en el mismo sitio.
¿Y qué?, ¿Dónde dejaste tus perfumes?, ¿A dónde se fue tu parecer?
Se burla el otro, gritando en tormentos también.

Pero ambos enmudecen por un instante,
Al ver a lo lejos el bello paraíso, frescura, paz.
Yo debería estar ahí, grita el pudiente, ese debe ser mi sitio,
Yo debería estar ahí, grita el asesino, nada recibí, siempre he perdido,
Pero el dolor del tormento es inmenso,
Y una voz grita desde el paraíso:
“No vienes aquí por bienes, o por falta de ellos,
Sino que un camino hay, solo uno,
A todos a sido predicado, Cristo es el camino.
No hay otra puerta, no hay otro camino.”

Permítenos volver, y entonces creeremos,
Permítenos volver, y lo haremos.
“Una oportunidad tiene el hombre, y después el juicio,
El que no cree a la Palabra, ha sido ya juzgado.”


Henry Padilla Londoño

sábado, 23 de octubre de 2010

Quiero pintar al Amor

QuieroPintarAlAmor
Quiero pintarte con palabras,
Acariciar tu piel con ellas,
Llegando a ti de a poco,
Lentamente acariciándote,
Mientras tú bailas al son de su sonido.

Quiero pintarte con mis ojos,
Lentamente e implacable.
Notar cada detalle, que bellos detalles,
Acariciando tus colores, parpadeando.

Quiero pintarte con mis besos,
Dejarme envolver en tu amor,
Envolverte, amarte.
Que hermosa pintura, que hermosa te ves.

Y quiero llevar mi pintura al mundo,
Esconderte en un pasaje secreto.
Solo percibirte yo... y tú.
Quiero que el mundo sepa cuanto te amo.

Quiero hacer un pacto con el aire,
Con el tiempo y con el cuadro.
Dejad que el amor llegue,
Llévalo viento, en todo tiempo,
Y plásmalo en mi cuadro.

Oh pintor, que pintas cuadros de amor,
Usa tus palabras, tus miradas, y tu amor,
Y pinta al amor, da tus pinceladas al corazón.
Deja ver tus colores, y escuchar tus palabras
Al corazón anhelante, sediento, de una caricia,
De un momento de Amor.

Henry Padilla Londoño

miércoles, 20 de octubre de 2010

Mi Salmo

Comparto mi Salmo con todos ustedes.
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Mi Salmo

Cuan bello es el Rey de toda la tierra
Cuan grande es Su nombre
Señor de toda la tierra
Rey soberano.

Has alzado mi vida del abismo
Me sacaste de en medio de la basura
De en medio de la nada
Tu misericordia me cobijo
Y lavaste mis vestidos

Alzo a ti mis manos
Rey de toda la tierra
Clamo a ti en mi salmo
Señor Santo, escucha mi voz.

Porque no hay otro que salve
Tú eres mi única salvación
El que me levanta, cuando todos me dejan
El que perdona mi iniquidad

Me sacaste de atrás
De los débiles y cansados
Me pusiste en una hermosa familia
Me haz llenado de tu bendición.

Nos has dado tu Palabra,
Hermosa y poderosa Palabra de Vida
Quien la escuche vivirá
Quien la guarde tu tesoro tendrá.

Abriste mis oídos, para oír tus dichos,
Abriste mis ojos, para ver tus maravillas
Escuchen, mis hermanos,
Atentos a mi dicho, que no es mío,
Sino del Señor que me lo dio

¿Por qué hemos de trabajar por lo que no da vida?
¿Por qué afanarnos por este mundo?
La vida es más que un trabajo
Y este mundo será juzgado

¿Y que hombre podrá rescatar con dinero su vida?
¿O Quien con inteligencia lograra salvarla?
Ni lo uno, ni lo otro es posible,
Pero la vida está a la mano, junto a ti.

Tiempos vienen, de llanto,
Tiempos de juicio, de dolor y guerra.
Porque lo dicho, es firme, y vendrá.
Abre tus ojos y lee, en la Palabra esta.

Pero un tiempo gozoso, para los que en Él esperan,
Su tiempo es siempre bueno,
No sufrirán daño, los que a Él claman.
El día de la angustia, esto se vera.

Soledad, quemadura, quien se sostendrá,
Y la tierra se ve sola, los hombres faltan.
Porque el día del Señor vino, y el lagar estaba listo.
Y recogió la semilla en el granero.
Y la cizaña en manojos quemo.

Alcemos nuestras manos,
Clamemos con el corazón.
Hace falta devoción y amor entre hermanos.
Pero de él todo lo bueno viene.

Un mal salió sobre toda la tierra,
Los hombres se unieron en una sola lengua,
Y alzaron su voz contra el Creador.
Dijeron:”Juntos venceremos, aún a Dios”

Y el Señor se burlo de ellos,
Los atrapo en su propio lazo.
Ninguno quiso escuchar,
Las Palabras del Señor.

Atiende a su Hijo, el Cristo.
Hónralo y llévalo en tu corazón.
El es el sentido de la vida.
El todo del hombre.
La luz de la mañana,
El despertar de los muertos.
La resurrección, la verdadera resurrección.

¿Donde estabas tú, hombre?
Cuando él clamo, cuando el dijo:
“Consumado es”
Consumado es para ti, y para mí.

¿Quien ha recibido las Palabras del Señor?
Y vi entre los hombres, el Señor me mostro,
Un grupo sin número, hombres, mujeres y niños,
Cantando todos al señor,
Con vestiduras blancas, todos ellos.

¿De dónde salieron estos?
Son los humildes, los que guardaron mis palabras.
Los que la pusieron por obra.
Estos que ves, son los redimidos,
Los que aceptaron mi sangre,
Como pago por sus pecados,
Los que no tienen otro Dios,
Solo me siguen a mí,
Y no invocan otro nombre.
Los que persiguen, a causa de mí,
Los que comparten su pan,
Los que están por levantarse,
Y harán tanto ruido,
Que aun el cielo mirara en alegría,
La última cosecha, mis hijos, mis hijas.
¿Estás tú entre ellos?

No digas que faltas,
Si lees esto, estas a tiempo,
Guarda tu vida del mal, guarda tu lengua,
Ama la Palabra de vida, llévala contigo,
Y cuando te digan, ¿Tú quién eres?
Di, con todo tú ser:
Uno de los redimidos,
De los limpiados en la sangre del cordero,
Del cordero de Dios, Jesús, el Cristo.
Yo soy un hijo de Dios,
Por fe, eso él me lo dijo.
Y si así creyeres, y así respondieres,
Eres Bienaventurado.
Porque tú parte está en cielo.

Henry Padilla Londoño

sábado, 16 de octubre de 2010

La habitación del Amor

lahabitaciondelamor
Me envolvían mis pensamientos, los acariciaba,
Pensaba en ti, en mi amada, la compañera de mi vida,
Mi corazón latió acelerado, todo yo estaba extasiado.
Tus besos me hacen soñar, estoy en un nido de amor.

El Amor, palabra corta y maltratada,
Es un cosquilleo en el estomago cuando te veo, dice el uno.
Es algo que no existe, dice el otro.
Es algo doloroso y peligroso, es lo que dicen,
Los llamados sabios de este mundo.

Pero a mí, me ha llevado a lugares maravillosos,
Llenos de colores desconocidos, de olores inesperados,
Me levanta al cielo, y en mi condición me lleva a ver la mansión de Dios.
Me ha dado a conocer la vida.

El Amor, no es de este mundo,
El Amor, no puede ser hallado, él encuentra quien quiere,
Hay un camino hacia él, pero es un camino invisible,
Que no puedes ver ni tocar, pero si experimentar.

El Amor, es el comienzo y el fin,
La mayoría dicen haberlo visto,
Pero son pocos los que de verdad lo vieron.
El Amor es Dios, y no es de este mundo.

Si tú dices amar, y no conoces a Dios,
Te has engañado, lo que sientes no es amor,
Llámalo así si quieres, pero no has visto ni la sombra que el deja,
El Amor habita con la Verdad, con el Perdón y la Santidad.

¿Conoces tú la habitación de la luz?
Si la conoces puedes decir que sabes del amor,
¿Has andado con la Vida? ¿Has ordenado a la muerte?
¿Te han levantado, y has sido llamado hijo de Dios?
Si así es, entonces eres amor, y sabes de él,
Pero sino estas sumido en oscuridad,
Hablando mentira, sumergido en tus propias cavilaciones,
Sin entender nada de la verdad.

Cuando el Amor te alcanza, llega tu muerte,
Y renaces a la vida, la verdadera vida.
No puedes andar en vida, sino has muerto,
Y no podrás morir, si la Vida no te alcanza.

El Amor y la misericordia van de la mano,
He visto quien llora, y no ama,
Y el amor lo alcanza, pero lo rechaza.
He visto el que llora y ama,
Un poco de llanto, un segundo en la eternidad,
Y serás levantado a gran gozo, a la Verdad.

Y el hombre pregunta: ¿Dónde está la habitación del amor?
A tu lado, tocando a tu puerta, en las esquinas de la ciudad,
Siempre ha estado ahí, pero lo has rechazado,
¿Por qué preguntas hombre? Si tú lo has rechazado.

Y nos amo, el Amor nos amo, y se entrego,
Vino, y lo vimos entre nosotros, decían:
¡Allí está, mírenlo!, ¿Quién?
El Amor, está caminando entre nosotros.
¿Cuál es su nombre?, se llama Jesús.

¿Quieres conocer el cielo? ¿Quieres saber donde habita la luz?
Ven a Cristo, entrégate a él,
¿Quieres salir de tu laberinto de dolor?
¿Saber el por qué de tu vida?
¿Quieres saber la razón de vivir?

Y fui llevado, por el aire, me levanto,
Iba sobre muchas gentes, todas gritaban, lloraban,
Alzaban sus manos, estaban ciegos.
Y la voz dijo:
El que quiera venga y tome gratis del agua de la vida.
Y la multitud seguía gritando.
Pero vi unos, que se apartaban, e iban a la fuente,
A la fuente del agua de vida,
¿Quién se atreve? Y tú, ¿Te atreves?

Hermosa amada mía, eres un manantial de inspiración,
La rosa de mi vida, hermosa de mi corazón.


Henry Padilla Londoño

sábado, 9 de octubre de 2010

LIBRO: La Hormiga y YO

lahormigayyo
Quiero compartir con todos ustedes, este libro. Es un cuento, bueno así comenzó, pero poco a poco fue tomando un camino más profundo. En todo caso, creo que encaja entre lo que llamamos cuentos. Es la fantástica historia, de un niño, que viaja a otros mundos, a otros tiempos, llevado por un amigo muy especial, una hormiga. Pero además, es una alegoría de la Salvación. En este libro quiero atraer al lector a las verdades eternas, quiero introducirlo a un mundo aun más fascinante, el mundo del Reino de Dios. Como lo relato en el prologo del libro, cuando comencé a escribir, pensaba que iba a ser un cuento de niños, pero poco a poco la Verdad tomo su propio camino, y me llevo a escribir esta historia. Pero si el lector se llegara a interesar sinceramente por conocer a Dios, entonces debes ir al libro de los libros, a la Biblia, solo en la Biblia, puedes encontrar la verdad, y creyendo en la verdad, llegar a ser salvo.
Sus comentarios me son muy importantes, sus criticas, sus aportes, de antemano gracias por todas ellas. Agradezco a todos mis lectores, aunque solo seamos unos pocos. Bendito es el Señor, a Él sea toda la gloria y la alabanza, el Señor bendiga ricamente a todo aquel que lea este libro.

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La Hormiga y YO

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sábado, 2 de octubre de 2010

La casa de lana.

lacasadelana
He visto en los ojos del niño,
En su mirada serena, en su sonrisa abierta,
La esperanza del mañana,
Sueños a que se aferra,
El anhelo de la mano paterna,
Del que se va y apenas conoce,
He visto en sus ojos un llanto,
Por el juguete no alcanzado,
Por el dolor de la soledad,
Por la amargura de ver y no alcanzar,
He visto en sus ojos un destello de amor,
La belleza de lo inesperado,
El cariño desinteresado,
He visto ángeles reflejados en sus pupilas.

He visto en los ojos del Padre,
Su mirada alejada, lejana y extranjera,
Que quiere huir de la situación,
He visto como cuerdas en su interior.
Preocupación y confusión, entereza y flaqueza,
Una lágrima encubierta,
Un dolor que no se expresa,
Soledad, has perdido el camino.

He visto en los ojos de la Madre,
En la que no tiene valor de decir lo que piensa,
Dolor y soledad, respeto y despecho,
El destino la ha tomado, y la lleva presa,
Y ella llorando se lamenta,
He visto inconformismo y aceptación,
Ante lo que piensa que no puede enfrentar,
Mi vida se me va, mi belleza.


Y mire en los ojos de mi amada,
Y vi un destello de Dios, un hermoso pensamiento,
Blanco como la lana, hermoso de verdad,
Y me escondí en esa hermosa casa,
Y en amores nos embriagamos,
Mi amada y yo, en la casa de lana.

Y allí me alcanzo el mundo, agitado y tormentoso,
Soplaba fuerte, quería entrar y despertar a mi amada,
Calla viento, enmudece, que mi amada duerme,
Yo he visto tu fracaso, por que tocas a mi puerta,
Yo no tengo pacto contigo.

Cuando ella río, el sol miro,
Vamos a nuestro Padre, me dijo,
Y volamos como pájaros, dejamos nuestra casa de lana,
Volamos al cielo, en las alas del viento,
Y el mar nos pregunto:
¿A dónde van los enamorados, que lugar han escogido?
A la casa del Rey vamos, al lugar perpetuo del amor.
Y la lluvia envidiosa, quiso mojar sus hermosos vestidos,
Cálmate agua de los tiempos, no te dejamos, solo nos elevamos,
Y el sol radiante de emoción, alzo su elocuente voz,
¿Quien les alumbrara ahora, quien tendrá ese honor?
EL Rey de Reyes, él es nuestra luz.

Y lo último que vimos, fue al niño, al Padre y a la Madre,
Que nos miraban aterrados, asustados,
Se preguntaban como podíamos hacer esto.
No podían entender que ellos un día,
Si quieren, también harán este hermoso vuelo.

Henry Padilla Londoño

sábado, 25 de septiembre de 2010

A Cuentas con Dios

YdijeNo
Esta es una muy corta historia que he escrito, y deseo compartir con ustedes. Les tomara solo unos minutos leerla, y espero les haga pensar. Esta dirigida a todos, pero en especial, a todo aquel que ha dejado para “después”, estar a cuentas con Dios. El Señor los llene de bendiciones.
Seleccionen el link, y se abrirá automático en sus computadores. Si no tienen Adobe instalado, también pueden leerlo en mi cuenta en Scribd.
A Cuentas con Dios.

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A Cuentas con Dios.

jueves, 23 de septiembre de 2010

Que más quiero, si te tengo a ti.

jennyYo
Estaba pensando en ti,
Pensaba lo mucho que te quiero, ¡cuanto te amo!
Tú eres mi refugio, mi Dios, mi consolador,
El sentido de mi vida y de mis días.

Buscaba en mi corazón, como decirte lo que siento por ti,
Buscaba palabras, buscaba expresar lo que hay en mi corazón,
Pero en medio de un caos estaba de repente,
Mi corazón gritaba y callaba, contemplaba y anhelaba.

Oh, Señor, Rey de los cielos,
Que el mundo entero sepa cuanto te amo,
Solo me queda dejar mi corazón,
Tal como está en tu presencia, míralo, obsérvalo.

Si vivo, es para ti,
Cuando estoy en mi trabajo diario, te anhelo, te busco,
Lloro en mi interior, Ven Señor Jesús,
Cuan hermosa es toda tu creación.

Y mirando a mí alrededor, veo al mundo,
Que agitado se revuelve en sus ansias,
Que grita y me asedia, queriendo cautivar mi atención,
Pero esa palabra que me dijiste me sostiene.

Esa hermosa palabra, que hoy quiero repetir,
Suave y ligera, para que todo el que me escuche,
La tome y la haga suya,
Y dijiste: Hijo, te amo.

Gracias Padre, gracias, eres el sentido de mi vida,
Que más quiero, si te tengo a ti.

Amen.
Henry Padilla Londoño

jueves, 16 de septiembre de 2010

Un camino esperando por ti.

UnCamino1
Un camino hay ante ti,
La vida te espera, tienes un compromiso.
El Señor esta a tu diestra, y anhela andar junto a ti,
Ya todo está preparado, valiente del Señor.
No puedes ver el camino, porque aun no lo has andado,
Espera que tú marques con tus pisadas la brecha a dejar,
Tú decides si vas, a tu derecha o a tu izquierda,
¿Cuál es la dirección de Dios?
Dios espera que empieces caminar,
El llevara tus pasos, por sitios insospechados,
Y si fueras hacia el mar, y vieras todo perdido,
Con un muro de agua que bloquea tú camino,
Y el enemigo te asedia por detrás,
No temas, el Señor abrirá el mar, y por seco podrás pasar.
Que puede salir mal,
A los que a Él aman, todo les lleva a bien,
¿Aunque me equivoque, y escoja mal mi destino?
Solo confía en Él, y no podrás fallar,
Porque no está en tu sabiduría, ni en tu gran experiencia,
Es en confiar de corazón en Él, en eso está la victoria.

Vamos, levántate gigante, ya es hora de caminar,
Ya no pienses mas en lo que no fue,
Y empieza de la mano del Señor,
A marcar la senda que muchos seguirán.

Henry Padilla Londoño

sábado, 11 de septiembre de 2010

El camino de la separación.

elcaminodelaseparacion
Esta historia es algo triste, pero tiene un mensaje, debemos perdonar y confiar en el Señor, el lo puede arreglar todo. Bendiciones.

El camino de la separación.

La vida tiene que seguir, piensas, mientras esperas que el juez,
Te pregunte si aceptas disolver tu unión,
Es solo un papel, ¡y ya!, seguiré, ya encontrare alguien que me ame,
Piensa ella, mientras se coge las manos, sin querer mostrar su inseguridad.

Incompatibilidad, dice el papel, así le llaman ahora al adulterio,
Piensa ella conteniendo su rabia, que desgraciado, espero que sufras.
Y te quitare todo lo que pueda, ni un centavo te dejare,
Así como me hiciste sufrir a mí, me las pagaras.

Todo salió mal, que podría hacer, piensa él mirando indiferente,
Ella solo gritaba, y su control, su maldito control, que me ahogaba,
¡Ya está!, me conseguiré otra y se acabo,
La vida tiene que seguir, y yo seguiré mi vida.

Mientras Carlitos y Rosita, miran con sus ojos llorosos,
La puerta de la oficina donde sus padres están,
Saben que algo malo pasa, pero no les quieren contar.
¿Pero por qué no perdonan? ¡Y ya! ¿por que mamá?, ¿por que papá?

¿Crees que ya no nos quieren, que nos dejaran?
Pregunta Rosita, mientras mira angustiada a Carlitos, su hermanito,
Tengo miedo, dice la niña, cogiéndole la manito,
Sera mejor irnos, antes que ellos salgan, ¿nos vamos?

Mientras una voz, un susurro, implora una vez más, a sus oídos,
Dice al corazón de los padres:
"Lo que Dios unió, no lo separe el hombre",
"Ven a Cristo, él sanara tu corazón y restaurara tu familia"

¡No, tengo que ser fuerte!, piensa ella, mientras aprieta sus dientes,
No puedo mostrar que estoy pensando esto.
¡Tengo que olvidarme de todo!, piensa él,
Pensé que yendo a la Iglesia todo saldría bien.

Y la voz se aleja, se va, dejándolos en su incredulidad,
Mientras sus hijos corren, han salido de la oficina,
Y corren, van cogidos de la mano, llorando.
Llegan a la estación del tren, cansados y llorando,
Yo te cuidare, le dice Carlitos, cogiendo la cara de su hermana entre sus manos,
Ellos nos han dejado, pero yo te cuidare, dijo el niño decidido.

Carlitos, dice ella sollozando, Jesús no nos ha dejado, él nos ama,
Y aunque nuestros padres nos dejaran, él no nos dejara,
Porque él es bueno, él es nuestro papa.
Y ahí en la estación se arrodillan, y dan gracias a Dios.

Por tu culpa maldita, grita él desesperado, mira lo que has hecho,
Ella llora desconsolada, sin poder decir palabra,
Pero si aquí los dejamos, ¿Por qué se han ido?
¿Por qué nos pasa esto, por qué se han ido mis hijos?

Desde entonces dicen que ellos dos los buscan desesperados,
Andan buscando dos niños, a Carlitos y a Rosita,
Atrás dejaron el acta de separación, firmado y sellado,
Y no quisieron escuchar la voz que les hablo.

Dicen que los han visto, a dos niños que caminan cogidos de la mano,
Andan felices y cantando, dicen que han encontrado su amor,
El amor incondicional, de Cristo, pero los que los vieron,
Dicen haberlos visto en el cielo jugando, en sueños, en visiones de Dios,
Porque ellos están ahora con el Señor.


Henry Padilla Londoño

lunes, 6 de septiembre de 2010

LIBRO: Tocando Su Gloria II, El día que la tierra fue vaciada.



Acabo de terminar el segundo libro de esta saga, Tocando Su Gloria, con la ayuda de Dios. Les invito a leer la segunda parte de esta historia.
Los eventos aquí descritos, aunque son ficticios por ahora, creo empezaran a acontecer en un futuro cercano. El tema central de esta parte de la historia es los sucesos ocurridos al mundo después del arrebatamiento de la Iglesia, ¿como quedo el mundo?, ¿Cómo vive la gente de ese tiempo?, ¿existen cristianos?, la influencia del mundo espiritual en todos los eventos que están ocurriendo y que están por venir.
En la primera parte de esta historia, nos adentramos en el mundo espiritual, la primera parte muestra el mundo espiritual, se responden a preguntas como:
¿Como influyen los demonios sobre las personas?
¿Como ayudan los ángeles?
¿Qué autoridad tiene los cristianos?
¿Qué papel tiene la Iglesia en el mundo espiritual?


Les invito a que se adentren en esta historia, que seguramente moverá a más de uno de ustedes, y espero, los haga pensar en cuanto a su vida y relación con Dios.
Aunque los libros son de temas cristianos, la historia se desarrolla en el mundo. Así que, algunas situaciones, pueden ser encontradas algo chocantes para algunas personas sensibles. Es mi aspiración, que estos libros sean leídos, tanto por los cristianos, como por los no creyentes.
Si una persona llegara al conocimiento de Cristo Jesús, a través de la lectura de estos libros, considerare pagado todo mi esfuerzo, y seré eternamente agradecido a Dios.

Debo dar toda la Gloria a Dios, Señor mío, que es quien me ha ayudado a escribir estos libros. Hace solo unos meses, nunca hubiera pensado escribir libros, pero por la gracia de Dios, es que he podido llegar a hacer esto. Bendito sea el Señor y todo aquel que de corazón busca al Señor. Una bendición especial para todo aquel que lea estos libros.

Henry Padilla Londoño

sábado, 4 de septiembre de 2010

Contémosle a todos del Rey de Gloria.

creacionCristo
Contémosle a todos del Rey, del que creo todo,
Todo lo hizo con su poder, con sus propias manos,
Sin ayuda de nadie, sin consejo ajeno,
Que fue antes del tiempo, sin principio, ni fin.

Del Rey que creo tronos, ángeles y querubines,
Potestades, y todo lo invisible,
De ese Rey que creó el universo visible,
La tierra y el mar las formo,

"Produzca la tierra vegetación" dijo el Rey,
Y la tierra se lleno de todo lo verde,
Con flores hermosas, y frutos exquisitos,
Que hablaban de la Gloria del Rey.

"Produzca la tierra seres vivientes" dijo el Rey,
Y la tierra se lleno de aves y peces,
Seres que se arrastraban y que andaban.
Cuanto poder, cuanta vida, Oh Rey, cuanta sabiduría.

Contémosle a todos de ese Rey poderoso,
Al que amamos, y adoramos,
Y venimos a proclamar,
Que él es nuestro Rey.

Y dijo el Rey, "Hagamos al hombre",
"A nuestra imagen y semejanza",
Y lo formo con sus manos,
Y soplo su vida en él, le dio una parte de Él.

El universo cantó ¡Gloria!
Gloria al Rey, al creador, que hermosa creación,
Quien como tú, Rey eterno,
Toda la creación se extasió en adoración.

Pero la sombra de la muerte vino,
Y Satanás mordió con su veneno,
El hombre se alejó del Rey, del creador,
Dolor y muerte, esclavitud, llegaron.

Cuanto los amo, dijo el Rey,
Mi hijo, mi creación, presa del pecado,
Muerte en sus venas, para siempre lejos de mí,
Yo proveeré un camino de Salvación,
Exclamo el creador y toda la creación en suspenso quedo.

¿Quién podrá vencer el pecado?
Exclamo el Rey, hay alguien que quiera ir,
Y ayudar a mi hijo, sacarlo de esclavitud.
Hay alguien que me libre de este dolor que llevo.

El cielo se estremeció, a todos llego la pregunta:
¿Quién ira?, ¿Quién puede tal proeza cumplir?
¿Quién podrá vencer, al pecado y al diablo,
Y traer de nuevo al hijo junto al Rey de Gloria?

Los ángeles lloraron, los querubines taparon sus rostros,
No había uno que pudiera, era muy dura la tarea,
Satanás grito de alegría, y se escucho por toda la creación:
"He vencido", yo vencí al creador.

Y fue entonces que el Rey de Gloria se paro,
Miro a toda su creación, y se despojo de su manto de Rey,
Dejo su corona a un lado, y sus sandalias de rey dejo,
"Yo iré, dijo el Rey, yo los traeré"

Y el Rey de Gloria, el creador descendió,
Y tomo la forma de un hombre,
Se llamó Jesús, y creció y vivió como todos,
Hasta que empezó a llevar la verdad a todos.

Se enfrento al Satanás y venció,
Se enfrento al pecado y prevaleció,
Solo faltaba un enemigo por vencer,
Y ando cual gigante hacia él, sin temor.

Y la muerte lo envolvió por completo,
Los ángeles lloraban de desesperación,
El Rey había dicho, "no podrán intervenir"
Y la noche inundo la tierra, el Rey murió.

Solo y despojado, como un asesino, junto a ladrones.
Dio su vida el Creador, el Rey de Gloria,
Y la piedra se corrió, la muerte dijo:
"Vencí al creador", la tierra es mía.

Horas oscuras, de expectación, los ángeles lloraban,
El cielo en suspenso estaba,
Han matado al creador, el autor de la vida muerto es.
Y los hombres ciegos, no entendían.

Algo está pasando en el Gólgota, en esa gruta,
Una luz poderosa se ve, de mañana es,
La piedra se corre, y los guardias caen en asombro,
Y ahí está una figura, ¿Quién es ese que sale de la tumba?

El Rey de Gloria, gritan todos, es él,
El cielo estalla en adoración, GLORIA,
El Rey está vivo, y con él millares, miles de millares,
Saco a la luz, esa mañana el Rey de Gloria.

La muerte ha sido vencida,
Satanás ya cayo de su pedestal, y vencido esta,
El pecado fue condenado y juzgado,
Solo una cosa queda ya: Gloria al que vive.

Contémosle a todos del Rey de Gloria,
Del que fue y creo todo,
Del que se despojo y murió,
De aquel que venció a todos, y saco la vida.

Tú estabas ahí, cuando Cristo resucito,
En Cristo estábamos todos los que creemos,
Ya vencimos la muerte, el Rey de Gloria lo hizo,
Solo queda que digas, Gloria a Dios por Cristo,
Mi redentor y Señor, el que me rescato.

Henry Padilla Londoño

lunes, 30 de agosto de 2010

Aquí, junto a ti.

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Aquí a un lado, junto a ti,
Aquí, escucho tu apacible voz,
Aquí mi corazón está tranquilo,
Y confiado en tu cuidado.

Mi alma te alaba y en paz miro a ti,
Mi corazón descansa en ti,
Y tu paz me inunde,
Aquí, junto a ti.

Te amo Señor, quiero decirte que te amo,
Tú has sido bueno conmigo,
Has levantado mi vida del abismo,
Te exaltare en medio de la congregación.

Renuncio a lo que fui,
Renuncio al dolor y al yo,
Me revisto de ti, de Cristo,
Me revisto de tu mente Señor.

Levanto mis manos en adoración,
Ya la enfermedad se fue,
Ya no hay dolor,
Mi libertad ganaste, en la cruz.

Mi luz es tu Palabra,
Mis pies no tropiezan porque tus dichos sigo,
Mi corazón está firme, tus palabras mi fundamento,
La misericordia y la verdad me guían.

Cuanto te amo Señor,
Cuanto te anhela mi corazón,
Aleluya, dice mi corazón,
Has levantado al que estaba caído.


Henry Padilla Londoño

viernes, 27 de agosto de 2010

Ya el cielo te llamo

linnfenerstrom
Ya el cielo te llamo, para
Linn Fenerstrom


Mi alma esta triste hasta la muerte,
Mis ojos son ríos de agua que corre fuertemente,
No hallo consuelo,
Mi hermana, mi amiga, se ha ido.

Fuiste ejemplo de pureza y amor,
De ayuda, y de compasión.
Recuerdo como compartiste con nuestra hija,
Tu hermoso libro de libertad.

Gracias, Linn, gracias por ser como eres,
Y un día nos volveremos a ver,
Junto al autor de la vida,
Junto a nuestro Señor.

Vuela, paloma del cielo,
Vuela a tu creador, vuela, que él te llamo,
Y disfruta el cielo, alumbra el cielo,
Con esa luz de Cristo, que inundo tu vida.

Dejaste una huella, una huella en nuestro corazón,
Una huella de amor, de compasión,
De amistad y de verdad.
Vuela hermosa hermana en Cristo,
Ya el cielo te llamo.

Henry Padilla Londoño
Jenny Lara Padilla

lunes, 23 de agosto de 2010

El lugar donde termina toda enemistad.

dondeterminatodadisputa
A todos mis hermanos en el cuerpo de Cristo,
Los amo, dejémonos amar por el Señor.

El lugar donde termina toda enemistad.

Mi alma esta triste, sin consuelo,
Clamo a ti, Dios del cielo,
En el nombre de Jesús, escúchame Señor,
Mi oración, mi clamor.

¿Por qué llora mi hermano?
¿Por qué su causa se esconde de la Verdad?
Si el perdón y el amor, debería reinar en nuestro corazón,
Pero el dedo acusador, incesante habla en la reunión.


Mi dolor es por los dos, y aun por tres,
Por el que llora sin encontrar explicación,
Por el que acusa, sin mostrar perdón,
Por el cuerpo del Señor, que sufre por nuestra acción.

Llévanos Señor, donde el perdón y la misericordia se encuentran,
Donde la sangre, el pecado y la luz coinciden,
Llévanos a la puerta del cielo,
A la cruz de nuestro salvador, Jesús, el Señor.

Y haz que tu amor, resplandezca en nuestras vidas,
Que el perdón llene nuestros corazones,
Que el amor entre hermanos, sea mayor que todo argumento,
Donde el cuerpo de Cristo resplandece en poder,
En gloria, en autoridad, donde solo el amor inunda,
Donde cada unión entre los miembros es un oasis de amor,
Y el menor es levantado por el mayor,
Y el mayor es siervo de todos,
A ese lugar donde el cielo se une con la humanidad,
Donde mi corazón por primera vez clamo LIBERTAD,
A ese precioso lugar, que es Cristo, donde termina toda enemistad.

Henry Padilla Londoño

sábado, 14 de agosto de 2010

Viento lleva mis palabras al cielo

Vientolleva

Viento lleva mis palabras al cielo,
Dile al Señor que le amo,
Dile cuanto lo anhelo,
Ve y dile que lo extraño.

Mira la flor como te ama Rey del cielo,
Mira la tierra que sedienta clama por ti,
Mira el águila que grita, tiene sed de ti,
Mira mi corazón, se estremece de amor por ti.

Ven, señor Jesús, Ven,
No tardes más, amado de mi alma,
Mi corazón desfallece de amor,
Mis ojos son ríos de llanto indomable.

Ven, Rey del Cielo, Ven,
Ven sobre tu caballo blanco,
Hazme clamar de amor,
Levántame a ti, llévame contigo,
Extranjero soy y peregrino.

Viento lleva mi canción,
Despierta mis hermanos, levántalos,
Y alcemos nuestras manos, todos juntos,
Digamos a una, que el mundo escuche,
Ven Señor Jesús.

Henry Padilla Londoño

jueves, 12 de agosto de 2010

Salmo 34:1

bendecirealSenor
Bendiciones hermanos. Les regalo esta grafica, si les gusta, pueden usarla en sus computadores como fondo de escritorio.
"Bendeciré al SEÑOR en todo tiempo; su alabanza será siempre en mi boca."

martes, 3 de agosto de 2010

Nueva portada para el libro “El Reino de la Verdad”

El Reino de la Verdad
EL Libro El Reino de La Verdad tiene ahora una nueva portada, también he hecho una corrección ortográfica a los tres libros. Bendiciones hermanos, les invito a dejarme sus comentarios

Alegorías usadas en los libros.

Donde nace La Luz
En los tres títulos que he publicado hasta ahora, uso alegorías, para tratar temas Bíblicas, la intención no es solo llevar un rato de lectura con una historia interesante, sino dar un punto de vista Bíblico a diferentes temas, tratados en los libros.
Estaré publicando una lista de alegorías usadas en los libros, que el Espíritu Santo me ha inspirado a escribir, para llevar estas historias hasta ustedes.

EXPLICACIÓN DEL LIBRO DONDE NACE LA LUZ:
El libro "Donde nace La Luz" es una novela que relata la historia de un niño, que es llevado al corazón de un asesino, y guiado por el Espíritu Santo, es llevado por las diferentes áreas del "corazón" (Bíblicamente hablando) humano, hasta llegar a la salvación. Trata temas como el perdón, la oración, la dureza de corazón, la mente humana, argumentos de la mente, cómo se reproducen, lo que es necesario para la salvación sincera, y queda en el punto del nuevo nacimiento. Todos estos temas son tratados de forma alegórica, en forma de historia, no van a encontrar un estudio, sino una historia que es basada en estos temas desde el punto de vista Bíblico.
Los invito a leer el libro, a detallar estas alegorías, y a comentarlas. Estaré publicando una lista de alegorías usadas en los libros más tarde, mi interés es que los lectores sean los primeros en hallarlas y comentarlas. Bendiciones.

lunes, 2 de agosto de 2010

La creación se detuvo.

lacreacionsedetuvo
El incomparable sonido de las aguas, llenan todo rincón,
Una brisa cálida y suave juguetea, como queriendo conquistar al mar,
Se acerca lo acaricia, se aleja y le sonríe,
Mientras él magnífico mar, se deja coquetear, la mira y sonríe,
Y con elegancia golpea las olas rezagadas y cansadas,
Enamorando aun a la luna, que empieza a dar su resplandor.

Y yo soy testigo mudo de esta orgía de amor,
Veo cuando la luna le declara su amor,
Cuando se entrelazan, su luz y su canción,
Y elevan una adoración, al que creo los cielos, la tierra,
Y la brisa se suma a su eco, formando un coro, coro de la creación.

El cielo escucha con atención, tan magnífico epíteto,
Aun el creador observa, gustoso, la alabanza de la creación,
Pero de pronto, por un momento, el Rey se levanta,
Algo especial esta por suceder, alza su mano,
El viento calla, enmudece,
La luna se sonroja, y espera,
El mar se detiene, silencioso observa,
Los ángeles se detienen, y quieren ver lo que el Rey ve,
Algo sublime esta por suceder,
¿Qué pasa? Te preguntas, tú que lees,
¿Qué detuvo tan magnífica alabanza?
¿Qué hizo al Rey levantarse y callar su creación?
El Rey espera que tu corazón,
Lleno de Cristo, lo alabe y le des tu amor,
Porque tu alabanza, nacida de la fe en Jesús,
Es más valiosa que toda la creación.

Tu alabanza es tan valiosa,
Que el Rey dio lo más amado,
Lo más precioso, el tesoro del cielo,
El tesoro del cielo fue entregado por ti,
Es el Hijo del Rey,
Jesús, el Señor, tesoro del cielo.

Y si ahora lo alabas, con Cristo en tu corazón,
Serás más valioso que todo el oro junto,
No hay mayor tesoro, que un corazón renovado,
Y alabando a Cristo.
Alaba a Cristo, Él está a tu lado,
Dentro de ti, no te detengas más,
ALÁBALO, ALABA AL REY.
Aleluya.

Henry Padilla Londoño

martes, 27 de julio de 2010

LIBRO: Donde nace La Luz



Quiero compartir con todos ustedes mi último libro: "Donde Nace La Luz".
Es una historia fantástica, que lleva a un niño, a palpar la oscuridad más absoluta, la maldad plena. Es una historia de FE, de valor, de perdón. Donde la Palabra de Dios, rompe toda oscuridad, y enfrenta al lector a sus propios temores, dejando al lector la pregunta, que se hace en cada paso de esta aventura: ¿Crees tú, en Jesús, el Cristo?
 
Una aventura fantástica, en la que la Palabra de Dios tiene el personaje central. Una alegoría a las profundidades del corazón humano, que revelara las partes más ocultas del corazón. Te invito a compartir esta historia y a dejarte llevar por la Palabra de Dios, en el viaje más fantástico al corazón humano.
Puede pulsar la portada del libro o el enlace para descargar el libro en formato PDF.

Donde nace La Luz

martes, 20 de julio de 2010

Encontré un amigo.

EncontreunAmigo
No es fácil andar por la vida, dice alguien en la multitud,
Sí, hay que trabajar, luchar, pelear, gritar, llorar, y morir, dijo otro más allá,
Y soledad, desconsuelo, congoja, dolor, enfermedad y todo lo demás,
Fue un eco que se escuchó.

Si todo eso era YO, dijo uno que nadie notó,
Y moría en vacilación, en duda y temor,
Hasta que encontré a Cristo, el Señor,
Encontré un amigo, grito.

Todos callaron al momento, y en silencio lo miraron
¿Un amigo? has dicho, dijo alguien muy extrañado
¿Tú quieres decir alguien que esta a tu lado en toda ocasión?
Ya iba a responder, cuando entre la multitud continuaron:
¿Encontraste uno que te ama incondicional?
¿O acaso uno que comparte su pan?
¿Uno que levanta y esta a tu lado en la enfermedad?
¿O uno que no juzga tus errores y los perdona?, grito una mujer más allá,
¿O acaso uno que te ama más que el hermano?
Quien diera encontrar uno que me librara de mi maldad, dijo otro casi en llanto,
¿Has encontrado un amigo?, soñador, dijo un hombre rudo y enojado.

He encontrado a Jesús, el Señor, dijo el hombre alzando su voz,
Es un amigo de verdad, que me da todo lo que han dicho, y mucho más,
Me ha dado la vida, una vida de verdad,
Ya no busquen más, dijo el muchacho ahora gritando,
Jesús es el buen amigo, él quiere ser tu amigo,
Dijo señalándolos a todos, ahora la pregunta es:
¿Quieres ser tu amigo de Jesús, el Señor?

Henry Padilla Londoño

viernes, 16 de julio de 2010

Mi viejo y Yo

MiviejoyYo
Que viejo, tírame unas lukas que necesito.
Lo miro por un momento sin expresión.
No estas en nada, parce, voy a salir con mi nena,
El padre volvió a mirarlo, sonriendo un poco.

Que tengo que vivirla,
Gozar con mi nena, salir afuera,
Que esto me es una cárcel,
Tírame unas lukas.

¿Piensas que nací viejo?, o ¿qué ya no me acuerdo?
Que los años carcomieron mis recuerdos,
Piensas que no disfruto
Que no disfruto la vida plena.

Bájate de ese tren, tu juventud es chévere,
Pero no para destruir tu vida,
Sexo, hijos sin padres, mujeres y hombres destrozados,
Droga, momentos de luces, cerebros calcinados,
Rock Metal, que me eleva, pilas con la caída,
Rebeldía, ilusión del momento, dolor de años.

Hay uno que es Cool, chévere de verdad,
Jesús, el que llaman el Cristo,
El vivió una vida sin problemas,
Vivió pleno, tuvo amigos,
No tenia guitarra pero muchos lo seguían,
No usó drogas, y se elevó sobre todo,
Decían que era rebelde,
Porque solo hizo la voluntad de Dios,
Hablo de la fornicación, que NO es chévere,
Cásense, no se quemen.

Y si en otro planeta haz estado,
Y no conoces al más Cool de todos,
Su nombre es Jesús, el que murió en la cruz,
Aterrizas, el que resucito al tercer día.
Ah… ese, si ese, el Señor de Señores,
El Rey de Reyes, acércate a él, pídele perdón,
Y deja ya de quejarte, y haz algo por tu vida,
Lo mejor que puedes hacer,
Es entregar tu vida al Señor, A JESÚS, la pillas.


Henry Padilla Londoño

lunes, 12 de julio de 2010

La vida que pasa

lavidaquepasa
Pasa la vida, paso pensando, decidiendo,
Pasa el tiempo, pasa mi alma gritando,
Entre la tormenta de la decisión,
Entre la paz aparente de la sumisión.

Pasa el amor, pasa silbando,
Pasa mi vida, pasa cantando,
Pasa el amigo indiferente,
Pasa tu vida inconscientemente.

Pasan las cosas, y tú, pasas preguntando,
¿Por qué pasan? Destino o suerte
Pero hay algo que no pasa
La Palabra de Dios permanece para siempre.

EL pasar de la vida te agita,
Y tú vives en continuo pasar,
¡Alto! ¡Detente!
Que la vida no pase de ti indiferente.

El aire trae un susurro,
Que dice solemnemente,
El que en Él cree, no pasara,
Vida eterna tendrá.

No dejes pasar mis palabras,
Como el agua se te escapa entre los dedos,
Dejas ir tu vida, pasar,
Y lo más importante, dejas escapar.

Jesús, no lo dejes pasar,
Grita, que te escuche el mundo,
Que el viento lleve al cielo tu grito,
Tu clamor, que todos escuchen,
Ayúdame Señor, dilo fuertemente,
El no dejara pasar tus palabras.

Quién supiera, si esta palabra, ¿pasará de ti?

Henry Padilla Londoño

viernes, 9 de julio de 2010

Feliz 24 Aniversario

Aniversario
Caminando por las calles de mi ciudad,
El sol dejaba ver su esplendor,
y la hermosura del día me hizo pensar en ti.
Te vi en el vuelo del ave,
En la hermosura de la flor,
Te oí en el sonido del mar,
En el susurro del aire,
Te vi, mi amor, en la sonrisa del niño,
En la mirada amiga del que me ayuda,
Y no pude más que apretar tu mano,
Y en silencio te mire, contemple tu hermosura,
Y por un momento todo desapareció,
Se fue, el universo se comprimió,
Solos tú y yo, solos como al principio,
Como hace 24 años, cuando el cielo nos miro,
Y delante del Señor hicimos pacto de amor,
Como ese día, día de verano, en que granizo,
Por un momento los ángeles tiraron su arroz.
Y le conté al gorrión, al cielo, al mar,
Al amigo, al hermano y a todo el mundo,
Que tú eres mi amor,
Tu mi Jenny, el amor de mi vida,
Preciosa reina de mi corazón.

Henry Padilla Londoño

lunes, 5 de julio de 2010

Y dije NO...

YdijeNo
Los invito a leer esta corta historia, solo te tomara unos minutos, la he guardado en formato PDF, la podrás bajar en el siguiente link:
Si la lees, te invito a dejarme tu opinión, lo puedes hacer en el facebook en nuestro grupo, o en el blog.
Y dije NO...
Haz clic en la grafica o en el link para descargar o ver el PDF.

viernes, 2 de julio de 2010

Delante del altar

DelantedelAltar
Mis pasos me llevaron a tu altar,
Solo y cansado, un poco aturdido,
Llegue y me postre, delante del altar,
Casi no podía hablar, solo espere, delante del altar.

Por un momento solo escuche mi respirar
rápido y difícil, había dejado a mis enemigos atrás.
El silencio me envolvió por completo,
La penumbra ya lo invadía todo,
Una brisa suave se dejó sentir.

Mis pensamientos vinieron a ti, Señor,
Si había de morir, que fuera allí, delante de tu altar,
Mis ojos se inundaron de llanto,
Mientras el sonido de mis palabras débiles, se escucharon,
Señor Jesús, aquí estoy.

No temas, hijo, aquí estoy,
Y siempre he estado contigo.
¿Quién fue el que te hizo huir?
¿Quién hizo que tu corazón se llenara de miedo?

Sus palabras resonaron en mi corazón,
Y me dolió el corazón, tan torpe había sido,
Había huido delante del enemigo,
Y Dios estaba conmigo.

Perdóname Señor, vi la fuerza de mi enemigo,
Vi su número, su agilidad, y me atemorice,
Entonces corrí, y me olvide de ti, Señor, perdóname,
Perdóname por huir delante de mi enemigo.

Tú eres magnifico, Rey de los ejércitos,
Delante de tu presencia encuentro mi fortaleza,
Y a tu presencia el enemigo huye,
Dios fuerte, magnifico Señor, no hay otro como tú.

Mi corazón estará de continuo en ti,
Edificaras tu altar en medio de mi corazón,
Y estaré seguro, porque Tú estás conmigo.
Enfrentaré al ejército enemigo,
Y huira, porque Tú estás conmigo,
Dios de los ejércitos.

Venid, alcemos nuestras manos a Dios,
Alabemos al Señor, Rey Poderoso y Eterno,
Estaremos confiados, tranquilos,
Porque el Señor está con nosotros.

Vengan los humildes, los mansos,
los que buscan Su Palabra,
Postrémonos delante del Señor,
Conozcámoslo en nuestro corazón,
Dios poderoso, que da vida al que ha sido lavado,
Al que ha recibido la redención de Cristo.

El Señor edificara Su altar en nosotros,
El altar de Cristo, el único altar,
Altar de los hijos de Dios,
Los redimidos del Señor.

Henry Padilla Londoño

miércoles, 30 de junio de 2010

La vida de mi hermano.

LaVidaDeMiHermano
Me duele tu tristeza, tu dolor, tu hambre,
Verte vagando y buscando tu diario vivir,
Tu mirada herida, dura y altiva,
Tus palabras que hablan solo de sobrevivir.

He visto tu andar, y me duele el corazón,
Verte andar entre las drogas, entre el dolor,
Entre la prostitución, entre las noches cortas con los muchos,
y los días largos sola encerrada,
Entre el robo, la muerte y el dolor.

Te he visto y me ha dolido el corazón,
Yo estoy en la comodidad de mi habitación,
Mirando de lejos, mirando tu triste condición.
Me duele mi alma, al verte mi hermana, mi hermano,
A donde la muerte, el engaño y el pecado,
Te han tirado, te han destrozado, sin compasión.

Pero el que me mostró tu condición,
Me dijo escribe, tira tu pan a las muchas aguas,
Que después de muchos días volverá a ti,
Y yo te escribo mis palabras, diciéndote,
Que te amo, que no estás solo, yo siento por ti,
Yo oro por ti, el Señor te sacara de allí,
Porque bueno es Él, que te ama, ¡oh! como te ama el Señor.

Oh si me escucharas, si oyeras hoy mi voz,
Déjate ayudar del Rey de Reyes, del buen pastor,
Su nombre es Jesús, el Cristo, el Señor,
Yo solo soy el mensajero, Él es el Señor,
Me saco a mí, como a ti también lo hará,
Si tan solo creyeras, cree, y lo veras,
Te librara de la muerte, te dará fuerzas para vencer.

Yo sé que has llorado, yo sé que has sufrido,
Pero es hora de dejar eso atrás, solo tienes que venir a él,
A Jesús, dile que te ayude, clama a Jesús,
No te arrepentirás.

¿Cómo? Gritas en tu interior,
Como, si he hecho lo impensable,
Si he dañado al inocente, si he hecho lo indecible,
Solo por amor, es esa la única razón,
Él te ama, y te quiere perdonar,
Atrévete a venir a Jesús,
Pide perdón, escúchame, escúchame,
El cielo está al alcance de tu mano,
Solo clama a Jesús, el Cristo, pide perdón.

He visto calles hermosas, llenas de luz,
He visto la carita del niño enfermo, radiante, sano,
He visto al que tenía hambre, compartir el pan,
Al que cojeaba de dolor, ayudar con su correr,
He visto al huérfano, besar y abrazar a sus padres,
Al que moría en la droga, dar clases de templanza,
He visto mi vida, salir de la plena oscuridad,
A su maravillosa luz,
Y te vi a ti, que lees mi mensaje, llorar de amor,
Alegrarse conmigo, orar por el afligido,
Vi a muchos hermanos, clamar por el que no tiene fuerzas,
Y a todos nos unía el mismo espíritu,
El Espíritu del Señor,
Y en medio de todos, estaba Él,
Precioso Señor, mirándonos con amor,
Preciosos hijos, dijo,
Clamen por el abatido, oren por el que no ve consuelo,
Levanten al caído, compartan el pan con el hambriento,
En esto conocerán todos que son mis discípulos,
En que os amáis, los unos a los otros.

Esto es para ti, para el que tiene oídos y oye.
Amén.

Henry Padilla Londoño

lunes, 28 de junio de 2010

La sombra de la cruz

lasombradelacruz
Quien pudiera entenderme, este mundo parece una cárcel,
Quiero vivir, quiero amar, quiero conocer, quiero hacer muchas cosas,
Quiero tener dinero, vivir plenamente, soy joven déjenme,
Pero me enfrentan y atormentan, solo me dicen lo que yo debo hacer.

Dentro de mí, clamo por amor, por atención,
Pero no como tú me la das, no me digas lo que yo tengo que hacer,
Porque yo viviere mi vida y no tú,
Pero ámame como soy, y déjame ser.

Tu confusión hijo, no es muy diferente de la nuestra,
Tú eres nuestra esperanza, nuestro mayor tesoro,
Pero sentimos que te perdemos, que te alejas y nos da miedo,
Miedo de perderte, miedo a verte fracasar, miedo…. Mucho miedo.

Hemos orado por ti, como te queremos,
Pero vemos que nuestras palabras te apartan, te alejan,
Solo queremos decirte que te amamos, que queremos ayudar,
Perdónanos, nunca pudimos encontrar un libro que dijera como ser papa.

Y la sombra de la cruz se extendió sobre la familia,
La cruz trajo la paz, la paz de Jesús, como solo él la puede dar,
Y el espíritu empezó a obrar, en los hijos, en los padres,
Los trajo a los pies de Jesús.

La roca dura e hiriente, fue cambiada por un suave silencio, dulce y apacible,
La mirada opresora y llena de odio, por un llanto de perdón indecible,
Y las palabras cargadas de autoestima, se las llevo el viento del amor,
Y la familia se vio, feliz, unida orando al Señor.

Y yo escuche tu dulce voz:
Escribe lo que has visto y oído, háblalo a los cuartos vientos,
Porque llevaré mi mensaje a muchos, a los que anhelan mi consejo,
Solo con el Espíritu del Señor, hay verdadero consejo,
Solo en Cristo hay verdadero perdón.

No ahuyentes a tu hijo, queriendo vivir la vida de él,
No hieras a tu Madre a tu Padre,
Vivan, vivan felices en Jesús, Jesús ya murió,
Y pago por todo, tráiganlo todo a la cruz,
Este es el verdadero remedio, la verdadera salud,
Cristo Jesús, muerto y resucitado,
Es la solución que estabas clamando,
Y si escuchas mi consejo, YO mismo, en medio de ustedes estaré,
Y traeré unión, bálsamo de amor,
Bendición sobre tu familia, sobre tus hijos, y los hijos de tus hijos,
Sobre todos, hasta la mil generación, porque yo te quiero bendecir,
Mis pensamientos son buenos, de bendición.
Cristo, Cristo es la solución.

Amen.

Henry Padilla Londoño

viernes, 25 de junio de 2010

Preciosa paloma del cielo.

PalomadelCielo
No sé hacer nada, ¿Qué podría hacer yo?
No sé hablar, no sé cantar, me da vergüenza todo,
Sí, yo amo al Señor, lo amo con todo mi corazón,
Pero nada más, los hermanos lideres, ellos son los que Dios escogió.
 
Mientras caminas a casa, sola y triste,
Eres seguida por el temor, que se esconde y agazapa,
Se deja ver en ocasiones, pero sigue jugando contigo,
Como lo ha hecho por tantos años,
Mientras tú lo mimas con tus palabras,
Con tus hechos le das fuerza.
 
El temor se considera tu amigo, tu siempre lo defiendes,
Es tu escondedero, el que te entiende cuando nadie lo hace,
¡Yo no tengo TEMOR! Dices airadamente.
Tú no sabes, tú no has vivido lo que yo he vivido.
 
Jesús me entiende, yo sé que sí, dices aferrándote a tu Biblia,
Sí, dice Temor, Jesús nos entiende, déjennos solos.
Mira a tu lado, el temor piensa como tú,
Pero Jesús vino para que fueras libre.
 
El temor te ha dicho todo este tiempo,
Que tú no sirves, que mejor es alejarse, que ya no vale la pena,
Pero Jesús no espera que tú hagas nada nuevo,
Porque Él ya lo hizo todo por ti.
 
Alza tu rostro, perla del cielo, eres la más hermosa,
La que Dios considero digna, de enviar a Su Hijo por ti,
No escuches otras voces, escucha al Señor,
"Yo he venido para que tengan vida y vida en abundancia"
 
No pienses más en que TÚ debes hacer, en que TÚ no tienes,
El Señor lo hace todo por ti, el Señor te da todas las cosas,
Eres el tesoro del cielo, que está por mostrar a todos, las verdades eternas,
Extiende tus alas y vuela, preciosa paloma de Dios,
Vuela sobre las alas de la fe,
Extiéndete a tu derecha y a tu izquierda,
Muéstrale al mundo las maravillas que Dios ha puesto en ti,
Vuela en el viento de la Palabra,
Déjate guiar por las corrientes de su Espíritu,
Vive, vive plenamente, preciosa paloma de Dios,
Que Cristo late con fuerza en tu corazón,
Deja atrás el temor, el YO NO PUEDO,
Deja lo tuyo, y recibe lo de Cristo,
El cielo entero está atento a que empieces tu vuelo,
¿A dónde llegaras? ¿Cuál será tu destino final?
Solo el altísimo es tu límite, el solo sabe tu destino,
Preciosa paloma del cielo.
 
Henry Padilla Londoño
 
 
 
 
 
 

miércoles, 23 de junio de 2010

Una segunda oportunidad...

UnaSegundaOportunidad
Ella corría con toda su fuerza, no se atrevía a mirar atrás,
Sentía como si los pasos la estaban alcanzando, corría desesperada,
Corría por su vida, de repente una luz la cegó,
Cayó al suelo, sin poder hacer nada, escuchaba como de lejos,
¡La tenemos, la tenemos!, alcanzo a oír lejos que decían.

Sintió un líquido viscoso que corría por su rostro,
Y recordó su infancia, su mama,
María, corre, vamos a llegar tarde a la Iglesia.
Pero mama… yo no quiero ir.

Nada de eso, muévete, no quiero llegar tarde,
Y que saca uno con escuchar de Dios, si Él está muerto.
No digas eso niña, él resucitó, él Vive,
Un día lo sabrás, o lo crees o te perderás.

Se está muriendo, no vale la pena, dijo la voz,
Mientras ella no podía mover su cuerpo, solo escuchaba y recordaba.
Mama… mama…. Repetía en su interior María,
Me muero... me muero…. Y no creí…. Me voy al infierno.

Muchacha, recordó el rostro de su madre,
El Señor es misericordioso,
Si le pides perdón te perdonara, solo tienes que hacerlo,
RECUÉRDALO… algún día lo necesitaras….

Jesús… Jesús… me muero…. Perdóname…
Que tonta fui, que necia, tengo miedo… me voy…
La luz inundó a María, ella perdió toda esperanza,
No alcance… no alcance…

María, María… aún no es tu hora….
Quiero que vuelvas, quiero que creas.
Señor, yo he sido tu enemiga, me he burlado,
He engañado a los que en ti creían.

Yo nunca creí, perdón….
Tu madre ha orado por ti, tu madre y tus hermanos.
Ve, les hablaras de mi misericordia, de mi amor.
Escucho María la voz, en medio de la Luz.

¿Quién eres Señor? Si me preguntan ¿Qué diré?
Yo Soy Jesús, el Señor,
Dile a todo el que quiera, que venga,
Y reciba gratis perdón, pero tienes que dejar de pecar,
No puedes seguir pecando.

Diles que ya morí por todos,
Para que fueran libres,
Háblales de la muerte,
No todos tendrán la misma oportunidad que tú,
Hoy es el día de Salvación para todos,
Esfuércense por entrar por la puerta angosta.

Diles que vengo en breve,
Que no desesperen,
Que estoy a las puertas.
Diles que los amo.

Y cuando despertó, se secó su sudor,
Era como si lo hubiera vivido,
¿Qué, fue solo un sueño?
O acaso, una segunda oportunidad,
Para María y para ti.

Henry Padilla Londoño

martes, 22 de junio de 2010

Un Salvavidas en el mar de oscuridad

Salvavidas
Tirado en el suelo, dejas caer tus lágrimas, tu dolor,
La suciedad, el descuido, hacen que todos pasen y se aparten,
Evitando tocarte, evitando mirarte,
El odio de tus ojos los asusta, tu contacto evitan,
Que ni se acerquen, ¡basura! Así piensas.

Otra hora más, otros minutos,
Todo va tan lentamente cuando tienes conciencia,
Solo esperando la muerte, la muerte, piensas, será tu fortuna.
Como dejado de Dios, como olvidado de Dios, así te sientes.

Ya no piensas en el pasado, ¡de qué sirve!
Estoy solo, y moriré solo, gritas en tu interior,
Aborreces pensar, recordar,
Eso fue otro hombre, otro y no yo, dices en tu interior.

Escúchame, esta es la voz que querías escuchar,
Te hablo en el nombre del Señor,
Porque Él me mando a hablarte,
Dios quiere ayudarte.

Él está ahí, a tu lado,
El Señor esta junto a ti, atrévete a creer,
De la oscuridad que estas te puede sacar,
Escúchame, yo estuve en la misma oscuridad.

Tienes que atreverte a creer, a venir a Él,
Pide Su ayuda, clama por Su ayuda,
Del sitio donde estas te puede sacar,
Y llevarte donde nunca jamás has soñado estar.

Él es Jesús, nuestro Salvador,
Jesús por ti murió, para que tú fueras libre,
Pero no basta con decir, tienes que atreverte a querer salir,
Salir de donde estas, y Él te ayudara.

La prisión en donde ahora estas,
Es a causa de tu pecado, y tú lo sabes,
Debes saber que Jesús ya pago por tus pecados,
El pago la deuda por ti, se libre, cree solamente.

Pero no puedes volver a tu pecado,
Déjalo atrás, SÍ, si es posible,
Solo atrévete a comenzar,
Te aseguro que Él te ayudara.

Vamos, tú eres valioso para Él,
Mira, mando a su Hijo por ti,
Envió Su Santo Espíritu para ayudarte,
Me mando escribir esto para ti,
Y está ahí a tu lado,
Esperando solamente que te atrevas a creer.

Vamos, ya muchos lo hemos logrado,
Tú también, eres especial,
No te dejes engañar,
Levántate y sigue a Jesús.

Amen.

Henry Padilla Londoño